KAMPALA.- El Papa Francisco abandonó este domingo Uganda con destino a la República Centroafricana para iniciar la tercera y última etapa de su viaje a África, considerada también la más peligrosa por la inestabilidad en el país.
El avión papal despegó sobre las 09:50 hora local (03:50 horas de Chile) del aeropuerto de Entebbe, situado a unos 40 kilómetros de la capital Kampala, tras la ceremonia de despedida oficial, y tiene previsto aterrizar en el aeropuerto de M'Poko en la capital, Bangui sobre las 10:00 hora local (06:00 horas de Chile).
Allí le esperará la presidenta del Gobierno de transición centroafricano, Catherine Samba-Panza, con quien mantendrá un encuentro en su residencia, junto a otros dirigentes y representantes diplomáticos, para analizar la situación del país.
Esta república ha albergado durante años una guerra civil que continúa recrudeciéndose y que parece no cesar, por lo que ha arrojado muchas incertidumbres sobre la seguridad tanto del Papa como de quienes acudan a sus actos, ya que sólo entre septiembre y octubre ha habido unas cuarenta muertes violentas en la capital.
El pontífice se ha descrito a sí mismo como un mensajero de la paz para un continente marcado por los conflictos y los ataques extremistas, incluyendo los dirigidos contra la creciente comunidad católica.
Durante su visita a Uganda, miles de fieles acogieron este sábado con fervor a Francisco, quien honró la memoria de 45 mártires cristianos, anglicanos y católicos, e hizo un
símbolo del ecumenismo entre ambas confesiones.