NUEVA YORK.- Naciones Unidas pidió este viernes el fin inmediato del sitio de las ciudades sirias por parte de los beligerantes, una táctica que calificó de "bárbara".
"No puede haber ninguna razón, ni explicación o excusa para evitar que la ayuda llegue a la gente necesitada", dijo Kyung-Wha Kang, responsable de las operaciones humanitarias de la ONU, en una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad.
Francia y Gran Bretaña solicitaron la reunión urgente después de que se conocieran informes sobre la dramática situación de la ciudad de Madaya, bajo asedio desde hace seis meses por el régimen sirio.
Esta situación ha condenado a la desnutrición a 42.000 personas, entre ellas 20.000 niños.
"La barbarie de esta táctica no puede ser ignorada", dijo Kang.
Equipos de Naciones Unidas están trabajando para proporcionar ayuda en el lugar y negociando la evacuación de residentes que sufren grave desnutrición, informó.
Nueve personas pudieron dejar Madaya para recibir tratamiento y otras 19 necesitan una evacuación urgente.
Según el Comité Internacional de la Cruz Roja, 400.000 personas viven asediadas en Siria, en donde la guerra civil ha dejado desde marzo de 2011 más de 260.00 muertos y obligado a millones de personas a huir.
Un adolescente de 16 años murió por desnutrición en Madaya, según Unicef.
Para el embajador francés François Delattre, que pidió la celebración de la reunión, el acceso a ayuda de urgencia no debe verse como un favor o una concesión al régimen sirio. Se trata de "una obligación absoluta" en consonancia con el derecho internacional, dijo.
Mientras que el representante adjunto británico Peter Wilson destacó que "Madaya es sólo la punta del iceberg" y que se debe asegurar "un acceso permanente" a los civiles asediados.
La representante adjunta estadounidense Michele Sison reclamó a su vez "un acceso humanitario rápido, seguro y libre a Madaya y a las otras ciudades".
"Todos los países integrantes de la ONU deben presionar al régimen sirio y a los otros actores", agregó.
La única nota discordante fue la declaración del representante adjunto ruso Vladimir Safronkov, que aunque también reclamó un mayor acceso de la ayuda humanitaria deploró que el Consejo "no diga palabra" sobre la situación en las ciudades sitiadas por los rebeldes, como Kafraya (noroeste), que también fue abastecida el jueves.
Safronkov denunció "la politización del tema humanitario" y recordó que el ejército ruso llevó a cabo una misión de asistencia humanitaria por aire en la región de Deir Ezzor (este).
