Ronald Reagan y Mijaíl Gorbachov en 1986.
El Mercurio (Archivo)
LONDRES.- El pasado viernes los Archivos Nacionales del Reino Unido desclasificaron una serie de documentos sobre la implementación del Acta final de la Conferencia de Helsinki (o Conferencia sobre la Seguridad y Cooperación en Europa que llevó al fin de la Guerra Fría) en donde se revela la estrategia de Londres de atribuir cualquier fracaso a Moscú.
La guía diplomática para la delegación británica, emitida por la Oficina de Asuntos Exteriores del Reino Unido, en el Foro Cultural de la Comisión de Seguridad y Cooperación en Europa realizada el 15 de octubre de 1985 en Budapest señalaba que "se debe poder atribuir cualquier fracaso a la hora de resolver problemas existentes (o incluso tomar parte en un debate importante) a la Unión Soviética (y sus aliados) y no a Occidente".
La atención de los archivos revelados recaen en su fecha, en tanto fue en abril de ese año cuando Mijail Gorbachov llegó al poder soviético para llevar a cabo las reformas al sistema, como la Perestroika, y puntualmente durante el proceso de paz y periodo de acercamiento entre Londres y Moscú en el marco de las reuniones posteriores a la Conferencia de Helsinki.
Según los documentos, los británicos indicaban que "vale la pena conservar la actual postura crítica respecto a las políticas de los gobiernos europeos orientales, tanto interiores como extranjeras, en un foro internacional".
Otro escrito sugería a los diplomáticos estar listos para "refutar cualquier aseveración por parte del Este de que deben protegerse de la contaminación cultural occidental: la pornografía, la propaganda del racismo y la violencia".
