WASHINGTON.- El director de comunicaciones de la campaña del aspirante republicano a la Presidencia de EE.UU. Marco Rubio acudió hoy a CNN expresamente para negar las informaciones publicadas por ese mismo medio que apuntaban a un debate abierto entre sus asesores sobre su continuidad en la contienda.
"Es 100 % falso. Es una ficción", aseguró el director de comunicación, Alex Conant, en referencia a la supuesta existencia de un debate en el seno de la campaña sobre si Rubio debe plantearse abandonar la próxima semana, incluso antes de las primarias de Florida del 15 de marzo.
"Estaba reunido con el resto del personal de campaña planificando los actos de la próxima semana cuando vi esta información y vine inmediatamente para corregirla", aseguró Conant en el estudio de CNN.
El propio canal televisivo publicó hoy que aunque Rubio mantiene esperanzas de ganar la nominación republicana, algunos de sus asesores creen que una derrota suya en Florida (el estado por el que es senador) le dañaría "tanto en el corto como en el largo plazo".
"En privado, la campaña está teniendo un debate sobre si (Rubio) debe permanecer, incluso de cara a las primarias de Florida", indicó la información de CNN, a la que una fuente no identificada aseguró que "una derrota en casa podría suponer un riesgo de cara a su futuro político".
La prueba de fuego de la viabilidad de Rubio como alternativa a sus rivales Donald Trump y Ted Cruz para la nominación del Partido Republicano es el próximo 15 de marzo, cuando vota su estado, Florida, en unas primarias clave donde el ganador se lleva los 99 delegados.
Si Rubio fracasa, el partido deberá considerar si opta por unirse en torno a Ted Cruz, que ha ganado seis votaciones, una posibilidad difícil de digerir ya que el senador por Texas ha labrado su carrera política desafiando al "establishment" y aupado por el movimiento ultraconservador del "Tea Party".
Además, los sectores tradicionales del partido, que al principio apostaron por el ex gobernador de Florida Jeb Bush, ven a Marco Rubio como un candidato con más posibilidades de vencer a los demócratas que Cruz, un riguroso conservador muy alejado de las posiciones mayoritarias en derechos sociales.
