BERLÍN,- Un camión embistió la noche de este lunes a una multitud en una feria navideña de Berlín, causando al menos nueve muertos y más de 50 heridos, según la policía, que sospecha que puede tratarse de un atentado.
De acuerdo a la institución, arriba de la máquina iban dos personas: el copiloto que murió en el lugar del hecho y el conductor que habría escapado. Sin embargo, las fuerzas de seguridad alemanas detuvieron a un sospechoso que sería el conductor.
Ante esto, un vocero policial expresó que "examinamos la pista de un atentado terrorista pero todavía no conocemos los móviles".
En un primer momento, la institución pidió a los berlineses que "se quedaran en casa" por precaución, pero más tarde, señaló que ya "no había ningún indicio de otras situaciones peligrosas" en el centro de Berlín oeste.
Según imágenes difundidas por la página web del diario local Berliner Morgenpost, se podían ver varios puestos del mercado navideño destruidos tras el paso del camión.
Asimismo, los accesos al lugar fueron inmediatamente bloqueado por las fuerzas de seguridad.
El mercado de Navidad contra el que irrumpió el camión está situado en pleno centro de Berlín, a dos pasos de la iglesia del Recuerdo, una de las principales atracciones turísticas de la ciudad, y de una avenida muy comercial, Kurfürstendamm.
Un turista que se encontraba en el lugar indicó a la AFP que no sabía si el conductor "estaba borracho" o si se abalanzó contra la gente de forma deliberada, "pero no intentó frenar, sólo continuó".
La policía desplegó un importante dispositivo en todo el barrio, mientras que las ambulancias seguían llegando a la zona poco antes de las 22:00 horas locales (18:00 en Chile), donde se encontraban vehículos de la Cruz Roja, dos camiones de medicina legal y numerosos vehículos de Bomberos.
Si bien aún no se comprueba si se trató de un atentado terrorista o un accidente, este drama recuerda el atentado del 14 de julio de 2016 en Niza, en la Riviera francesa, cuando un camión arremetió contra la muchedumbre en medio de los festejos de la fiesta nacional, matando a 86 personas. El ataque fue reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI).