SEÚL.- Un tribunal de Seúl decidió rechazar la orden de arresto contra Lee Jae-Yong, heredero de la empresa Samsung, luego de que fuera vinculado al escándalo de corrupción que involucra también a la presidenta surcoreana, Park Guen-Hye.
Los fiscales acusaron este lunes al denunciado de soborno, malversación y perjurio, al dar o prometer 43.000 millones de wones (36,3 millones de dólares) en sobornos a la confidente de Park, Choi Soon-Sil —mejor conocida como la "Rasputina"—, quien está actualmente en la cárcel.
El pago era, supuestamente, a cambio de que el gobierno respaldara una fusión de dos filiales de Samsung, un movimiento crucial para el traspaso de poderes de la compañía —el mayor fabricante de teléfonos inteligentes del mundo y empresa clave para la economía surcoreana— hacia Lee.
Sin embargo, según el tribunal, los fiscales no presentaron pruebas lo suficientemente sólidas. "Resulta difícil aceptar las razones, la necesidad y la justificación" para dar salida a la orden de arresto, señaló un comunicado de la fiscalía, que citaba la falta de pruebas inequívocas.