SANTIAGO.- Fuertemente custodiado y sin régimen de visitas en un hospital en Isla Margarita. Así se encuentra hace poco más de un mes Braulio Jatar, el periodista chileno-venezolano que fue detenido hace nueve meses por el Servicio de Inteligencia Bolivariano.
En su portal de noticias Reporte Confidencial, Jatar publicó imágenes de un masivo cacerolazo con que los vecinos de Villa Rosa, en Isla Margarita, recibieron al Presidente Nicolás Maduro, y fue detenido al día siguiente mientras se dirigía a su programa de radio.
Su hermana
Ana Julia Jatar contó a
El Mercurio desde Washington que debió ser trasladado al hospital porque, mientras permanecía en el penal de San Antonio, se sintió muy debilitado. Allí lo intervinieron por dos hernias.
La también periodista piensa que la posibilidad de liberar a su hermano se perdió. "La oportunidad que se tuvo cuando todavía las relaciones entre Chile y Venezuela tenían cierto diálogo, se perdió. Es la gran frustración que tengo", afirmó.
Aplaudió, también, que Chile haya tomado "una posición más dura respecto del Gobierno venezolano", pero advirtió que el regreso del embajador chileno en Venezuela, Pedro Ramírez Ceballos, quien fue llamado a consulta por la Presidenta Michelle Bachelet y llegó al país a fines de marzo, no ayuda a su propósito. "Las gestiones para la liberación de mi hermano se han paralizado", aseguró.
También lamentó que "las simpatías que tuvo el embajador chileno con el gGobierno venezolano" no hubieran sido "más útiles" para la liberación de su hermano.
Añadió, además, que no espera que la administración de Bachelet avance en la materia. "Creo que las posibilidades se han ido agotando. Siento como se siente la mayoría de los familiares de presos políticos. Nuestra gran esperanza es el cambio de régimen", finalizó.
