ISCHIA.- Los bomberos rescataron a los dos niños que habían quedado sepultados durante bajo su casa tras el terremoto de magnitud 4,0 que sacudió la isla italiana de Ischia a las ayer.
Mattia, de siete años, fue rescatado poco antes del mediodía local y posteriormente se comunicó que también se había localizado a su hermano Ciro, de 11 años.
Ambos permanecieron atrapados por más de 14 horas y tras ser rescatados fueron trasladados inmediatamente al hospital de la isla. Fuentes médicas aseguraron que se encontraban en buenas condiciones.
Toda la familia, los padres y sus tres hijos, habían quedado al interior de un departamento al derrumbarse completamente el edificio de dos pisos donde vivían en el municipio de Casamicciola, en el norte de la isla, y el único que ha sufrido daños. La primera que pudo salir fue la madre, que se encontraba en el baño, y después fue rescatado el padre, que dijo estar en la cocina cuando se produjo el terremoto. Durante la madrugada, en tanto, bomberos informaron del rescate de uno de los hijos, Pasquale, de siete meses.
Uno de los portavoces de los Bomberos explicó que el menor de once años logró salvar a su hermano al empujarlo bajo la cama y que a pesar de las condiciones en las que se encontraba, también guió a los equipos de rescate para localizar al bebé.
El sismo registrado ayer en la localidad italiana ha dejado ya dos personas fallecidas: una anciana que murió a las afueras de la iglesia en Casamicciola mientras descendía de su auto, y una mujer que ha sido localizada sin vida entre los escombros de su casa.
El terremoto causó también 39 heridos, el más graves es un hombre de 44 años que fue trasladado al hospital Cardarelli de Nápoles, tras resultar con traumatismos ante el derrumbe de su casa.
Tanto los habitantes como los turistas han pasado la noche a la intemperie y muchos de los visitantes han comenzado a abandonar la isla aprovechando la salida de los primeros barcos. Ya durante la noche, miles de turistas salieron de la isla.
El jefe de la Protección Civil italiana, Angelo Borrelli, que se trasladó a la isla tras el terremoto, explicó que hay alrededor de 2.600 desalojados, unos 2.000 de Casamicciola y otros 600 de Lacco Ameno.
