SAN JUAN.- El huracán Irma, el más poderoso del que se tenga registro en el Atlántico, se abalanzaba el martes en la noche hacia el noreste del Caribe en su recorrido que amenaza con batir Puerto Rico, República Dominicana, Haití, Cuba y otras islas del archipiélago antes de un posible giro hacia Florida.
Las autoridades de Antigua y Barbuda, los primeros territorios insulares a donde llegará el meteoro el miércoles en la mañana en el extremo nororiental de las Antillas, cortaron la energía eléctrica y, en un comunicado que concluye con la frase "Que Dios nos proteja", pidieron a la población mantenerse resguardada.
Irma se convirtió el martes en una peligrosa tormenta de categoría 5, con vientos de hasta 295 kilómetros por hora, de acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.
A medida que el fenómeno se fortalecía mientras se acercaba a las Antillas, el Centro Nacional de Huracanes dijo que se trata de un fenómeno "potencialmente catastrófico".
De continuar su ruta, el huracán podría llegar al estrecho de Florida, donde el agua es lo suficientemente caliente como para intensificar la fuerza del huracán, con vientos de hasta unos 350 kph, advirtió Kerry Emanuel, profesor de meteorología del Instituto Tecnológico de Massachusetts.
"La magnitud de este sistema, la peligrosidad de este sistema nunca se ha visto en Puerto Rico", dijo el gobernador de la isla Ricardo Rosselló el martes en la tarde en conferencia de prensa y anunció un plan de evacuaciones obligatorias para todos los residentes de zonas vulnerables de la costa noreste, desde Fajardo, en el extremo nororiental, a Dorado, al oeste de San Juan.
Puerto Rico, las Islas Vírgenes de Estados Unidos y Florida declararon el estado de emergencia. En tanto, los residentes de las zonas del Caribe en la ruta del huracán protegieron sus casas con tablones y realizaron compras de último momento, formando largas filas en el exterior de supermercados y gasolineras.