Sonny Morgan estaba en el piso 32 del hotel Mandalay Bay, el mismo desde donde se ejecutaron los disparos.
AFP
SANTIAGO.- Como era habitual, Sonny Morgan se encontraba en Las Vegas en un viaje por trabajo. Tras tener una cena de negocios la noche del domingo, se dirigió al hotel donde se hospedaba para descansar. Hasta ahí, suena a una historia común de cualquier persona que viaja a la ciudad con fines laborales, pero este caso es especial, puesto que la habitación de este hombre estaba a metros de aquella desde donde Stephen Paddock cometió el mayor ataque de la historia de Estados Unidos.
Morgan estaba hospedado en el piso 32 del hotel Mandalay Bay, ya estaba durmiendo cuando un fuerte ruido lo despertó. "Pensé que podrían ser algunos fuegos artificiales, pero el ruido seguía y seguía", explicó al medio televisivo 11Alive.
Fue así como este hombre de negocios llamó a la recepción del hotel alertando por el bullicio y explicando que pensaba que se trataba de disparos: "Podía oler la pólvora", agregó. El personal del hotel le pidió que se calmara, al mismo tiempo que le recomendó formar una barricada en su dormitorio, por lo que creó una trinchera con las almohadas en el suelo para protegerse.
Así estaba Morgan, cuando minutos después sentía cómo los oficiales de policía inspeccionaban todas las habitaciones del hotel en busca del autor de los disparos. Luego, se escuchó una explosión.
"Honestamente, en ese momento pensé que se trataba de un gran ataque terrorista, que alguien estaba tratando de hacer volar el hotel", relató, agregando que después de eso "inmediatamente llamé a mi esposa porque no sabía lo que estaba pasando, y le dije 'te amo'".
Luego, unos seis agentes SWAT ingresaron a la habitación de Morgan. "Se aseguraron de que yo no era una mala persona, que estaba haciendo lo que se suponía tenía que hacer. Nos acompañaron y nos dijeron que corriéramos lo más rápido que podamos para alejarnos", indicó, explicando que aún no tenía conocimiento de lo que realmente había ocurrido.
Y fue durante ese operativo que los efectivos policiales entraron a la habitación de Stephen Paddock, quien ya se encontraba sin vida en la misma habitación donde efectuó los disparos que dejaron al menos 59 muertos y más de 500 heridos.
En lo que respecta a Sonny Morgan, él sigue en Las Vegas y tiene programado volver el jueves a su casa en Lawrenceville, Georgia. Tras el ataque, el hotel lo trasladó a una nueva habitación, cuya vista "es probablemente muy similar a la que tenía el tipo (del ataque) y es el caos", señaló.
"Puedo ver dónde estaban exactamente las personas, puedo ver las ventanas que estaban rotas. Es realmente extraño", precisó.
