SEÚL.- Un soldado norcoreano protagonizó una dramática e inusual huida hacia Corea del Sur, recibiendo seis balazos disparados por guardias fronterizos de su país mientras cruzaba la frontera.
El Comando de Naciones Unidas (UNC) dirigido por Estados Unidos que monitorea el pueblo fronterizo de Panmunjom, donde ocurrió la deserción, dijo que el soldado se había desplazado en un vehículo todoterreno hasta las inmediaciones de la zona de demarcación que separa a las dos Coreas, conocida como Zona de Seguridad Conjunta (JSA), la cual está bajo estricta vigilancia por parte de ambos ejércitos.
Luego, cuando una de las ruedas se atascó en un desagüe, el hombre "salió del vehículo y escapó hacia el sur, atravesando la frontera mientras otros soldados le disparaban desde Corea del Norte", indicó el UNC en un comunicado.
Un responsable del comando militar conjunto surcoreano dijo que los guardias fronterizos efectuaron al menos 40 disparos, seis de los cuales impactaron en el soldado que intentaba refugiarse en un edificio contiguo a la Zona de Seguridad Conjunta.
Posteriormente, un helicóptero transportó al soldado herido hasta el Hospital Universitario de Ajou, en Suwon (al sur de Seúl), donde fue intervenido durante cinco horas por el doctor Lee Kuk-jong, famoso en el país por haber atendido al capitán de un barco mercante surcoreano herido de bala tras el ataque de unos piratas somalíes en 2011.
"Vamos a encarar momentos cruciales durante los próximos 10 días", dijo a la agencia Yonhap el doctor Lee, tras indicar que hay órganos importantes afectados y que se desconoce si el soldado logrará sobrevivir, puesto que se encuentra en estado crítico.
El cirujano dijo que serán necesarias dos o tres operaciones en total para salvarle la vida y que de momento el hombre, que está inconsciente y conectado a un respirador, tendrá que guardar reposo durante dos o tres días antes de volver a pasar por el quirófano.
Es muy poco común que se produzca una deserción en la JSA (hasta ahora se había producido una en 1998 y otra en 2007), y los expertos consideran que Corea del Norte elige cuidadosamente a los soldados que despliega en esa zona para evitar sucesos como este.
El hecho de que el soldado llegara a la JSA a bordo de un vehículo hace pensar que podría haber estado desplegado en otra zona lejos de la frontera y no pertenecer a este "selecto" grupo de militares.
