Los familiares estaban reunidos en la base naval de Mar del Plata.
AFP
SANTIAGO.- Rabia, desesperanza y desazón fueron los sentimientos que expresaron los familiares de los tripulantes del submarino argentino ARA San Juan, luego de que la Armada trasandina confirmara este jueves una explosión en el mar, en el marco de la búsqueda de la embarcación desaparecida desde hace ocho días.
"No pudieron terminar de leerlo (el parte). La gente se abalanzó. Están rompiendo todo adentro.", dijo Itatí Leguizamón, esposa del cabo primero Germán Suárez, sonarista del submarino perdido.
El enojo de esta mujer se centra más bien en la poca información que recibieron de las autoridades, poniendo en duda que recién hoy se enteraron de la explosión detectada. "¿Quién es tan estúpido para creer eso?", sostuvo.
"Mi enojo es porque creo que son unos desgraciados perversos que nos tuvieron acá una semana, por qué no nos dijeron antes", afirmó Leguizamón, agregando que ella presentía que iban a recibir una mala noticia, pero en la Armada "no te dicen nada, son unos desgraciados".
"Ya fue. Perdimos las esperanzas. Ya está muerto, ya está", indicó.
Los familiares recibieron la información en la Base Naval de Mar del Plata, donde se encuentran reunidos. De este modo, tras conocerse la noticia, algunos reaccionaron de forma más violenta.
"¡Mataron a mi hermano, hijos de puta! ¡Mataron a mi hermano porque los sacan a navegar con alambre!", dijo un hombre desde la ventana de su automóvil cuando salía del recinto, según informó Clarín. "Los jefes se roban toda la plata, ¡Macri, hacelos mierda!", repetía.
Años de abandono
Itatí Leguizamón también centró su crítica en la mala gestión histórica de la Armada argentina, revelando que el ARA San Juan ya había registrado falencias hace tres años. "Inauguraron un submarino pintado por fuera en 2014 con una bandera y por dentro estaba sin equipamiento", afirmó.
"
Mandaron una mierda a navegar, y quiero aclarar que esta mierda viene de hace años, no es de ahora, es de hace 15 años atrás", añadió.
Así, recalcó que "para mí, la culpa la tienen los 15 años de abandono de la Armada".