DACCA.- El Papa Francisco pronunció hoy la palabra "rohingya", el término que no había dicho hasta ahora por el consejo de la Iglesia de Myanmar, y tras encontrarse con un grupo de esta perseguida minoría musulmana en Bangladesh.
"La presencia de Dios también se llama rohingya. Que cada uno tenga su respuesta", dijo Francisco en italiano tras haber mantenido un encuentro con miembros de la minoría que procedían de los campos de refugiados en la provincia de Cox's Bazar, donde se han asentado al huir por la persecución que sufren en Myanmar.
El Pontífice, que también visitó suelo birmano previo a su gira por Bangladesh, no había pronunciado la palabra referente al grupo musulmán en ese país asiático.
Hoy, en tanto, en la ciudad de Dacca, se reunió con un grupo de tres familias rohingya, 16 personas en total, entre ellas dos mujeres que llevaba el nikab, que deja solo descubiertos los ojos, una niña y un bebe. Se detuvo con cada uno de ello para intercambiar algunas palabras.
El momento del encuentro fue al concluir la cita interreligiosa en la que Francisco participó en el jardín de la sede del arzobispado con representantes de musulmanes, budistas, hinduistas y otros cristianos. "Nos sentimos cercanos. Su situación es muy dura. Todos hemos sido creados a imagen de Dios", dijo el Papa a los rohinyas.
Y agregó: "En el nombre de todos los que les han hecho daño. Ante la indiferencia del mundo, les pido perdón". Muchos de los rohinyas lloraron tras el encuentro. "Continuemos ayudándoles. No cierren sus corazones y miren a otro lado", instó Francisco tras el encuentro.