SANTIAGO.- Este lunes se dio inicio a la investigación que busca determinar cuál fue la causa del crimen que ocurrió el pasado 29 de diciembre de 2017 en la localidad de Entre Ríos en Argentina, en el cual la joven Nahir Galarza, asesinó a su pololo, Fernando Pastorizzo de 20 años. A través de los teléfonos de ambos jóvenes, los peritos informáticos evaluarán los mensajes de WhatsApp y las llamadas que realizó la ex pareja, todo con el objetivo de reconstruir el vínculo que existía entre ellos.
De acuerdo a la información preliminar Nahir Galarza, de 19 años, asesinó con el arma de su padre a su pareja, de 20. Tras cometer el crimen, la joven regresó a su casa durante la madrugada del viernes. Cuando despertó, decidió dedicarle un mensaje a su novio fallecido en la red social Instagram, donde aseguraba que lo iba a amar para siempre.
"Cinco años juntos, peleando, yendo y viviendo pero siempre con el mismo amor. Te amo para siempre, mi ángel", escribió.
Una vez hallado el cuerpo de Pastorizzo, Galarza se desentendió del caso cuando fue interrogada por la policía. Sin embargo, en un segundo comparecimiento, la joven finalmente admitió haber asesinado a Fernando, desligando a su padre, el oficial Marcelo Galarza, de cualquier responsabilidad.
Las pruebas que definirán la resolución del caso
A partir de este lunes, la justicia comenzó a investigar sobre el vínculo que había entre la ex pareja, iniciando con una detallada investigación al contenido de los teléfonos de ambos jóvenes. La información que se encuentre en los móviles será clave, ya que determinará si se reduce la acusación a Galarza a homicidio simple, si se ingresa como un caso de violencia de género, o si se mantiene como homicidio doblemente agravado. Esto toma importancia, ya que el último delito descrito tiene como pena máxima la prisión perpetua.
Tanto los abogados de Galarza como los padres de Pastorizzo aseguraron que los celulares serán la prueba que mostrará que alguno de los dos sufría violencia de género. Por un lado, el padre de la joven afirmó al diario local La Nación, que su hija llegó a casa en algunas ocasiones con golpes en el cuerpo, mientras que por otra parte, para Carla Pastorizzo, su hermano era quien sufría de violencia, pero lo ocultaba por sentir vergüenza.
El fiscal de la causa, Sergio Rondoni Caffa, detalló al mismo medio que los peritajes comenzaron este lunes y podrán tardar entre 48 y 72 horas. Durante todo ese período, el objetivo estará en descargar los audios de WhatsApp que posean ambos teléfonos, así como hacer capturas de pantalla a las conversaciones que los dos sostuvieron por dicho medio. El análisis de todos esos antecedentes durará alrededor de dos semanas.
Además, el funcionario agregó que el viernes 5 de enero le solicitó a la oficina de Migraciones todos los registros, tanto de entrada como de salida, de la ex pareja entre el 2015 y 2017 para saber si es que, además de las vacaciones a Brasil que hicieron con la familia de la homicida, hubo algún otro viaje.
Finalmente, el fiscal exigió el registro de llamadas de todo el mes de diciembre de ambos teléfonos, y además, pidió la geolocalización de los celulares para saber dónde se encontraban los jóvenes cuando ocurrió el delito.
