SANTIAGO.- Considerado como un "justiciero" y "héroe", el juez de provincias Sérgio Moro es toda una figura en Brasil, y este jueves nuevamente hizo noticia al aceptar ser ministro de Justicia del Mandatario electo, Jair Bolsonaro.
Cargo frente al cual aseguró que llevará adelante una "fuerte agenda anticorrupción", siendo esa precisamente la bandera de lucha que ha levantado en su trabajo como magistrado de primera instancia en un tribunal de Curitiba en el sur de Brasil.
En dicho rol, se ha convertido en el gran antagonista del ex Presidente Luiz Inácio Lula da Silva, a quien le ordenó entregarse a la policía para cumplir una pena de 12 años de cárcel. Esto tras condenar al ex Mandatario brasileño por corrupción pasiva y lavado de dinero.
De hecho, Moro es conocido por liderar desde 2014 las principales investigaciones de la megacausa "Lava Jato", efrentántose así a políticos y empresarios.
Y si bien es considerado como un símbolo de la lucha anticorrupción, también se ha convertido en centro de las críticas del Partido de los Trabajadores (PT), que Lula da Silva lidera desde prisión. Incluso los abogados de éste, lo han acusado de "abuso de autoridad".
No obstante, ha asegurado no tener "ninguna desaveniencia personal con el señor ex Presidente". A la vez que le indicó que "va a ser tratado con el máximo respeto, como cualquier acusado".
Sus orígenes
El jurista es conocido por ser cercano a círculos conservadores, a la vez que tiene fama de ser un trabajador implacable y de no tener miedo al momento de perseguir penalmente a los poderosos.
Su labor incluso lo ha llevado a convertirse en uno de los personajes más alabados durante las protestas del 2016 contra la ex Mandataria Dilma Rousseff, siendo calificado por las multitudes como "el mayor héroe en la historia de Brasil". Tras lo cual su nombre también figuró como uno de los favoritos para la campaña presidencial.
De 46 años de edad, el magistrado proviene de la clase media blanca y nació en Maringá, en el sureño estado de Paraná, una de las zonas más ricas de Brasil y tradicionalmente de derecha.
Fue allí donde realizó sus estudios de Derecho, para luego especializarse en delitos de lavado de activos en un programa en Harvard, convirtiéndose en juez a los 24 años.
Ante su nuevo cargo, Moro anunció que se apartará inmediatamente de nuevas audiencias en el marco de la operación "Lava Jato", la cual apuntó seguirá adelante en la ciudad de Curitiba, al mando de "valerosos jueces locales".
