EMOLTV

Dueño del fundo y único investigado por homicidio en el Caso Julén: "Me siento como un saco de boxeo"

El español David Serrano habla luego de meses en silencio tras el fallecimiento del menor y cuenta cómo el accidente le cambió la vida y lo aisló.

04 de Mayo de 2019 | 21:33 | Redactado por Pía Larrondo, Emol
imagen
AP
David Serrano (36), el dueño del campo de Totalán en el que el pequeño Julén (2) cayó a un pozo y murió, y único investigado por homicidio imprudente, habló con un medio de comunicación español para defenderse ante la opinión pública sobre su responsabilidad en el caso.

Cabe recordar que el pasado 13 de enero, Serrano llegó con su familia y la de sus primos Vicky García y José Roselló, padres de Julén, a su fundo. Contra todo pronóstico,el niño atravesó los bloques y cayó al pozo de cien metros de profundidad. Lo ocurrido después ya es sabido: tras 12 días de intensa búsqueda, el menor fue hallado muerto y la familia Roselló perdió a su segundo hijo en menos de 2 años, Oliver había fallecido en 2017 por problemas cardíacos.

"Asumo mi parte de responsabilidad, la que marque la ley, pero de ahí a que sea yo el único culpable hay un trecho muy largo, creo que cada uno debería hacer examen de conciencia y reconocer su responsabilidad", dijo en una entrevista al medio español Cierre Digital.

Sobre los hechos que ocurrieron el día del fatal accidente Serrano explicó que cavaron varios pozos en su propiedad "para buscar agua, yo quería plantar aguacates y construirme una casita de madera como tiene mucha gente en la zona".

Respecto a si el pozo en el que cayó Julén estaba tapado sostuvo, "el pocero dice que sí, pero reconoció que estaba mal tapado porque pensaba que había riesgo de impago porque no encontró agua y lo dejó a medio tapar. En otro que sí encontró agua y se lo pagué a 27 euros el metro y éste era a 12 euros el metro excavado. A esas declaraciones no se les ha dado importancia. Yo puse unos canutillos (tubos) unos días antes para taparlo".

El dueño del campo defiende que todos tienen una parte de responsabilidad en la muerte del niño: el pocero, los padres de Julén y él.

A los papás les "dije muy claramente que iba a hacer de comer y que estuviesen pendientes de los niños porque no es un terreno llano, tiene pendiente y es muy irregular. De hecho, es el propio José –padre de Julén– quien decide poner al niño en ese lugar porque ahí estaba llano y el niño jugaba".

Serrano confiesa que su señora vio el momento en el que el menor cayó al pozo, "Julen echó a correr muy rápido en dirección al pozo, mi mujer Adriana intentó interponerse y José echó a correr y gritó ¡Julen, no!".

"(Adriana) lo vio caer y llora todos los días por ello. Tiene esa imagen metida en los ojos. Por eso cuando se especulaba con la posibilidad de que no estuviera allí sufríamos mucho", agregó.

Cambio de actitud

Según lo que cuenta Serrano, ambas familias eran muy unidas, tanto que su mujer, Adriana, era la madrina del hermano de Julén –que falleció dos años antes- pero después del accidente y en el transcurso del juicio se cortó la comunicación con ellos.

"No he hablado antes por dolor y respeto, pero me siento como un saco de boxeo a quien todo el mundo se cree que puede pegar y eso se tiene que acabar"

David Serrano, dueño del campo en Totalán
"No sé cómo puede cambiar alguien tanto en dos meses. Está claro que me dan mucha pena porque han tenido dos desgracias grandes en 20 meses, pero como he dicho su actitud y comportamiento de ahora no me parece normal. Esto es un barrio pequeño, nos cruzamos por la calle y ni nos miramos. Todo esto me supera, me parece triste y tremendo a la vez. José ha pedido que quien le hable a él no me hable a mí y al revés", manifestó.

Cabe destacar que en el juicio, al abogado de Serrano, defiende la hipótesis de que el niño no murió en la caída, sino que por una herida en la médula, según ellos, producto de la piqueta que usaron los rescatistas, versión contraria a la que defienden los padres.

Por otro lado, el dueño del fundo es el único investigado por homicidio imprudente en el caso, "es algo que no puedo entender. ¿Yo no tengo hijos, ni familia, mis padres no sufren por todo esto? ¿Por qué me quieren meter en la cárcel? Dinero no voy a poder pagar porque no tengo y menos me va a quedar gracias a las 31 sanciones administrativas que me han propuesto tras el atestado de la Guardia Civil. Trabajo de camarero cara al público y tampoco me da nadie trabajo. ¿De verdad tengo yo la culpa de todo?".

"Yo no pido que la sociedad me regale nada y asumiré mi responsabilidad compartida cuando lo establezca una sentencia y pido ser juzgado por lo que realmente tenga culpa. Hasta entonces soy inocente. Me siento prejuzgado y ya condenado. (…) No he hablado antes por dolor y respeto, pero me siento como un saco de boxeo a quien todo el mundo se cree que puede pegar y eso se tiene que acabar", finalizó Serrano.
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?