La Presidenta de Bolivia, Jeanine Áñez, arremetió este miércoles ante la ONU contra el Gobierno argentino de Alberto Fernández, acusándolo de intromisión y de amparar una conspiración "violenta" del ex Presidente boliviano Evo Morales contra su administración.
La Mandataria dijo en un discurso pregrabado ante la Asamblea General de Naciones Unidas que quería denunciar "el acoso sistemático y abusivo que ejerce, desde Argentina, el gobierno kirchnerista, contra las instituciones y contra los valores republicanos en Bolivia".
"Se trata de una conducta que ya describí al hablar de las castas populistas, castas que no dudan en utilizar métodos -francamente abusivos- para sostener sus planes, el poder y sus posiciones contrarias a la libertad", señaló la Presidenta.
En su discurso, de tono marcadamente ideológico, Áñez expresó su molestia hacia Argentina, país que no la reconoce como gobernante y donde Evo Morales se encuentra refugiado desde diciembre pasado tras haber renunciado a la presidencia en medio de una serie de protestas y acusaciones de fraude. Desde ahí, el ex Mandatario se ha desempeñado como jefe de campaña de su partido político, el Movimiento Al Socialismo (MAS).
La Presidenta boliviana planteó así la disyuntiva de libertad o "populismo caudillista y autoritario", y dijo que no tiene nada contra "el noble pueblo argentino" pero sí contra el Gobierno de Alberto Fernández.
"¿Cuál es la autoridad que tiene el Gobierno argentino para ofrecer impunidad a Evo Morales ante casos tan graves como las investigaciones nacionales e internacionales que están en marcha contra este ex dictador, por violaciones a los derechos humanos, por violaciones sexuales contra niñas o mujeres menores de edad, o por complicidad en asesinato político?", preguntó Áñez.
A fines de agosto, Bolivia envió un reclamo ante una posible intromisión en la que incurrió el subsecretario argentino de Obras Públicas,
Edgardo Depetri, quien, mediante su cuenta de Twitter se comprometió ante Morales, "a fortalecer la participación de migrantes bolivianos" en las elecciones generales del 18 de octubre.
Si bien Alberto Fernández ha dicho que Morales fue víctima de un golpe de Estado, hace varios meses que ni él ni su canciller Felipe Solá se pronuncian públicamente sobre la situación política en Bolivia. No obstante, el Presidente argentino se desconectó en la última cumbre virtual de jefes de Estado del Mercosur cuando Áñez tomó la palabra.
Aspiración marítima
Al final de su interlocución, la Presidenta boliviana también tuvo palabras para referirse a la aspiración marítima de su país, después del fallo de la Corte Internacional de Justicia de 2018 que rechazó la demanda del país vecino sobre una supuesta obligación de Chile de negociar una salida soberana al mar.
En un tono diametralmente distinto al de su antecesor Evo Morales, y sin mencionar en momento alguno a Chile, Jeanine Áñez abogó ante la ONU por una solución pacífica a través de la negociación.
"Hago un llamado a la comunidad internacional para que en estos nuevos tiempos solucionemos por la vía de la negociación y el entendimiento fraternal los problemas críticos y pendientes entre los Estados como la carencia de Bolivia de un acceso soberano al océano Pacífico".