SANTIAGO.- Una seria acusación contra abogados del caso Luchsinger-Mackay salió a la luz pública en las últimas horas, luego de que se supiera que la fiscalía de La Araucanía indaga un posible pago a testigos para que entreguen testimonios en contra de la policía.
Según informó hoy
El Mercurio, se trata de una investigación desformalizada respecto de parte de los profesionales que trabajan en la defensa de los 11 imputados en la causa, en la que arriesgan altas penas.
La semana pasada, los abogados Karina Riquelme y Sebastián Saavedra -defensores de imputados en el caso Luchsinger- presentaron un recurso de amparo ante la Corte de Apelaciones de Temuco para saber si estaban siendo indagados por la Fiscalía, pues decían ser objeto de seguimiento y fotografías de parte de policías y civiles.
En su respuesta a la Corte, en la causa 1022-2016, la fiscalía indicó que la PDI recibió información de una persona que afirmaba que Riquelme supuestamente recababa antecedentes para perjudicar al fiscal jefe de Temuco, Alberto Chifelle.
En el mismo escrito se aseveró que se investiga otra declaración dada ante la policía, que relata que "abogados de algunos comuneros ligados a la investigación de la causa Luchsinger-McKay" habrían ofrecido 10 millones de pesos para obtener testimonios contra policías que participaron en la investigación para presentarlas en el juicio oral.