SANTIAGO.- Un negativo balance entregó este domingo la Intendencia Metropolitana respecto de los incendios forestales que se han registrado en la presente temporada. Según informó, a la fecha éstos han aumentado un 3000% respecto del año pasado, lo que equivale a 22 mil hectáreas arrasadas por el fuego.
El intendente Claudio Orrego detalló que la superficie afectada contempla bosque nativo, pastizales y de arbustos, producto de la negligencia humana. Actualmente informó que existen dos focos activos: Uno en la comuna de Alhué y otro en la Cuesta Barriga, en la comuna de padre Hurtado.
Este último siniestro se propagó hacia Maipú por el sector de Quebrada de la Plata, por lo que la Onemi decretó este domingo alerta roja.
Este último ya ha consumido 500 hectáreas, pese al arduo trabajo de seis brigadistas forestales y Bomberos, apoyados por dos helicópteros contratados por la Conaf. No hay riesgo de propagación a casas, aseguró.
"El llamado es a la corresponsabilidad de las personas. No puede ser que se nos quemen 22 mil hectáreas en la región, muchas de ellas de bosque nativo, reservas naturales. Le gente sigue haciendo fogatas, sigue tirando colillas de cigarrillo, provocando incendios que son de un daño irreparable", alertó.
"La verdad es que estamos reiterando un llamado que ya nos tiene difónicos: Queremos que la ciudadanía entienda que hay que proteger lo que nos pertenece a todos, porque la precordillerana es un patrimonio de todos los santiaguinos", añadió.
La Región Metropolitana se mantiene con Alerta Amarilla por las altas temperaturas y el fuerte viento.
"Llevamos 3000% más de incendios, tanto en número como en superficie, que el año pasado en igual fecha. Es dramático. Si alguien hace fuego hay que denunciarlo", afirmó, tras participar en el lanzamiento del "Plan de Verano 2017: Parque Natural Quebrada de Macul".
La campaña la lleva adelante la Municipalidad de Peñalolén y busca concientizar sobre el cuidado del parque ante la proliferación de incendios forestales.
