La psicóloga Gabriela Opazo declaró hoy en el juicio contra Mauricio Ortega.
Poder Judicial
COYHAIQUE.- Como una mujer con todas los síntomas de estrés post traumático definió este martes, durante la segunda jornada de juicio oral contra Mauricio Ortega, la psicóloga Gabriela Opazo a Nabila Rifo, quien fue agredida brutalmente en mayo de 2016, quedando sin sus globos oculares.
En su testimonio, presentado como parte de la prueba de la fiscalía para acreditar la responsabilidad del único acusado en los hechos, la profesional, miembro del Centro de Apoyo de Víctimas de Delitos Violentos de esta ciudad, que pertenece a la subsecretaría de Prevención del Delito, detalló que la joven víctima reconoció haber mentido en la declaración donde exculpa a su ex pareja de la golpiza, para proteger al padre de sus hijos.
"Ella tiene sentimientos ambivalentes hacia el señor Ortega, pero, al mismo tiempo, temor a las represalias al señalarlo como su agresor y lo que ello puede significar para su ex pareja", agregó en estrado.
"Eso es absolutamente normal en víctimas de violencia intrafamiliar", insistió Opazo, detallando que "tener ese tipo de sentimientos hacia su agresor es común e incluso ella (Nabila) comienza a comportarse como ella piensa que él quiere que lo haga".
En la misma línea, relató que Rifo le comentó que "el señor Ortega la descalificaba, la insultaba constantemente e incluso mencionó situaciones de humillaciones", aludiendo a que en oportunidades le arrojó su ropa a la calle o le pedía que se fuera de su domicilio.
Por último, destacó que la joven considera que tiene una relación conflictiva con su madre, con quien vive actualmente junto a sus cuatro hijos.
Ayer comenzó el juicio oral contra el único acusado por la golpiza que recibió Rifo, a quien el Ministerio Público le atribuyó participación en calidad de autor de los hechos de femicidio frustrado, mutilación, amenazas y violación de morada.
Por estos hechos, propuso una pena de 29 años de presidio efectivo.
