EMOLTV

Científicos plantean posibles escenarios ante energía sísmica acumulada en la costa central

Los expertos reconocen que existe inquietud por la seguidilla de sismos que han afectado a la costa de la zona central.

25 de Abril de 2017 | 09:13 | Emol
imagen
El Mercurio (archivo)
SANTIAGO.- El terremoto de ayer de 6,9 Richter, con epicentro frente a la costa de Valparaíso revivió una preocupación no solo de la población, sino también de los científicos: la posibilidad de un sismo mayor.

Según explica hoy El Mercurio, por un momento se creyó que el terremoto de magnitud 7,8 de 1985 había liberado la energía acumulada desde el último gran sismo de 1906, sin embargo, análisis más detallados revelan que ese evento de hace más de tres décadas fue solo de una intensidad mediana.

Incluso el de 1906 se ve empequeñecido por uno que ocurrió en 1730, el que habría alcanzado una magnitud 9 Richter, produciendo un maremoto que cubrió Valparaíso y lo que hoy es Viña del Mar.

Desde entonces no se ha producido nada equivalente, es lo que se conoce como la hipótesis de las brechas sísmicas: donde en el pasado hubo un gran terremoto y la energía no se ha liberado por completo, hay probabilidad de que se repita en forma más o menos similar en el futuro, y así sucesivamente, lo que se denomina ciclo sísmico.

Sergio Barrientos, director del Centro Sismológico Nacional reconoce que "si uno se pone a pensar que la placa de Nazca está penetrando bajo la sudamericana a razón de 6,5 centímetros cada año, si en algún lugar hay un atasco y la placa no penetra, mientras más tiempo pase, el terremoto (cuando se libere la energía) será cada vez más grande".

Para el terremoto del Maule de 2010, el desplazamiento de la costa hacia el oeste fue de unos 6 metros. "Para producirlo significa que la falla se movió alrededor de 20 metros de una vez. Eso significa que a razón de 6,5 centímetros por año hubo una acumulación de energía de 300 años".

En definitiva, los terremotos más importantes sirven para acomodar las placas. "Cualquier terremoto más pequeño solo lo hace en forma parcial", dice.

Los temblores que se han sucedido con epicentro en la costa de Valparíso, y en especial el de ayer, estarían ayudando a liberar la energía acumulada, reconoce Barrientos, quien calcula que la ruptura que produjo este último sería cercana a los 50 kilómetros. Eso, dice, ya es casi un terremoto de magnitud 7.

No obstante, para Marco Cisternas, geógrafo de la U. Católica de Valparaíso, la mayoría de los sismos que se habían sucedido hasta la tarde de ayer han liberado muy poca energía en comparación con uno grande.

"Sí llama la atención que estén ocurriendo tan seguido y focalizados en un punto". La mayoría de los temblores que se han presentado ocurrieron entre 20 y 40 kilómetros al oeste de Valparaíso.

El especialista, que ha estudiado el terremoto y maremoto de 1730 y los grandes sismos posteriores, reconoce que hoy la ciencia no está en condiciones de responder con precisión qué podría ocurrir. "Los escenarios van desde que no pase nada mayor, que haya un terremoto de magnitud moderada como el de 1985, o hasta que se genere uno muy grande", dice Cisternas.

Un escenario similar al actual, agrega Barrientos, ya ocurrió en 2003, cuando durante varios días hubo una sucesión de temblores pequeños y medianos, y finalmente la tensión bajó.

Otro tema pendiente es la sismicidad marina. "Nos falta evidencia de los grandes terremotos que han tenido lugar en el mar. Hacer muestreos del fondo marino nos ayudaría a entender qué ha sucedido en el pasado y tener mejores modelos de lo que podemos esperar en el futuro".

La ciencia hoy no puede dar respuestas exactas y por eso hay que estar preparados, admite Cisternas. "El problema es que somos vulnerables porque las ciudades costeras están a nivel del mar y con alta densidad poblacional", advierte.
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?