SANTIAGO.- El reto de la "Ballena Azul" ya tiene dos casos en Chile. El primero en Antofagasta, donde una niña de 12 años se autoinfirió cortes en su brazo; y otro en la comuna de Coronel, Región del Biobío, donde un menor de edad anunció un intento de suicidio. El provocarse heridas y atentar contra la vida, son parte de los 50 pasos de este peligroso viral que tiene en alerta al mundo y las redes sociales.
Aún se desconoce si alguien incitó a ambos a atentar contra su integridad. ¿Pero qué responsabilidad penal tiene una persona que envía este controvertido reto a otra u otros a través de mensajes masivos de redes sociales? Responde a Emol el profesor de Derecho Penal de la Facultad de Derecho de la U. de Chile, Lautaro Contreras.
"Esa persona que reenvía este mensaje (el reto de la "Ballena Azul") podría eventual y teóricamente ser responsable por auxilio al suicidio, pero para ello se requiere un conocimiento de causa. Por ejemplo, tengo que saber que esta persona que recibió el 'juego' está muy deprimida y quiere suicidarse", señaló.
Sin embargo, luego aclara: "Pero no basta con mandar la invitación. La pregunta es si el sólo hecho de enviarla implica un castigo penal o sancionarlo con cárcel, por un 'juego' que la persona puede participar voluntariamente o no".
El académico explica que el "auxilio al suicidio" se cumple cuando alguien ayuda o coopera con otro a terminar con su vida, para lo cual no necesariamente el "colaborador" debe estar presente. Por ejemplo, podría incurrir en este delito entregándole un arma al suicida.
Ahora, en caso de que una persona se provoque heridas, como ocurrió en el norte, al que envió la invitación a la "Ballena Azul" podría imputársele el delito de lesiones de autoría mediata. Es decir, la comisión de un delito a través de otra persona; figura legal que también podría aplicarse en el anterior caso.
"Pero siempre y cuando la voluntad de la víctima sea anulada por alguna depresión, por ejemplo, y que ésta haya sido aprovechada por el emisor del mensaje", insiste el académico y penalista.
Con todo, encontrar responsables por eventuales delitos en la práctica de este reto al que recomiendan no aceptar, será complicado, reitera el profesional.
"Por qué es complicado en estas situaciones, porque puede haber una condición de anonimato entre el receptor del mensaje y el emisor o a este último no le costa que éste sea un potencial suicida. Pero, nuevamente, para castigar a alguien como autor de homicidio o autor mediato de homicidio le tiene que constar la situación de depresión de la víctima", manifestó.
Entonces, señala, todo dependerá del tipo de relación entre la víctima y el autor, si se conocen o no, y de cuán anulada esté la voluntad de la víctima.
"Esa persona que reenvía este mensaje (el reto) podría eventual y teóricamente ser responsable por auxilio del suicidio, pero se requiere un conocimiento de causa. Por ejemplo, tengo que saber que mi primo está muy deprimido y quiere suicidarse; no basta con mandar la invitación", insistió el abogado Contreras.
El FBI habría alertado en las últimas horas a la Policía de Investigaciones (PDI) del caso del adolescente que, supuestamente, se disponía a transmitir en vivo su suicidio en Youtube.
