SANTIAGO.- La filántropa y psicóloga chilena que gestionó la llegada del avión SuperTanker, Lucy Ana Avilés, anunció que junto a su esposo Ben Walton -nieto del fundador de Walmart-, este año invertirán US$ 30 millones en proyectos de impacto social en Chile.
Desde causas relacionadas con la salud mental de mujeres y niños hasta iniciativas de desalinización de agua, son algunos de los proyectos en los que el matrimonio chileno-americano está evaluando aportar.
"Chile es mi país, ahí viven mi familia y amigos. Mis hijas son mitad chilenas y es gran parte de lo que yo soy como persona", declaró Avilés a
El Mercurio.
"Nos interesa potenciar la inversión de impacto en Chile, porque la consideramos una herramienta valiosa, efectiva y que ha sido ampliamente utilizada internacionalmente", agregó.
Otros aportes
A pesar de que matrimonio se hizo conocido por el mega avión que combatió los incendios forestales del verano, sus aportes comenzaron el año 2007, principalmente en la zona costera de la VI y VII Región. Incluso, tras el terremoto de 2010, entregaron más de US$ 3 millones para reconstruir y habilitar la escuela de Iloca.
Según detalló Avilés, hasta este año "habíamos hecho donaciones muy en silencio. Pero al ver que mi país se quemaba, que se perdían vidas y la desesperación de la gente, comencé a pedir ayuda públicamente para movilizar a más personas. Después se unieron otros empresarios y personalidades en nuestra cruzada. Fue un acto desesperado. Jamás busqué figurar ni hacerme famosa".
Millonarias donaciones
En total, las donaciones filantrópicas realizadas por el matrimonio en Chile desde el 2010 suman US$ 7,5 millones: US$ 2 millones para financiar el SuperTanker, US$ 3,1 millones para la reconstrucción del colegio de Iloca , US$ 1 millón para Desafío Levantemos Chile y la misma cifra para la Fundación Enseña Chile.
"Hoy estamos levantando información, contactando a profesionales, hablando con gente del Sename e investigando qué existe y qué falta por hacer. Nuestro compromiso es real y verdadero", manifestó Avilés.
Otro tema que les preocupa son los recursos hídricos del país. Según Benjamin Walton, esto "es un problema real que en treinta años no va a haber agua entre Arica y el Biobío. Santiago ya no va a tener los tres glaciares que lo abastecen, y tenemos que analizar posibilidades de abastecimiento, ya sea con desalinización u otra alternativa".
Es por eso que la pareja está organizando un workshop en Chile para fines de junio, con expertos en usos del agua, autoridades, empresarios y académicos, con el objetivo de generar ideas y respuestas en esta área. Aún no definen si es que van apoyar con donaciones o invirtiendo en soluciones sustentables.
"Todas nuestras inversiones tienen un foco social. Todo lo que hacemos, nuestra meta de vida es la filantropía. No estamos invirtiendo en nada más. Lo que nos mueve es buscar soluciones de mercado para problemas sociales", concluyó Walton.