SANTIAGO.- A contar de este sábado y durante 30 días, el Servicio Nacional de Menores (Sename) se hará cargo del centro residencial Alihuén de Buin, tras una petición interpuesta por el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).
El recinto estaba bajo administración de Coanil y es cuestionado por malos tratos a niñas, niños y adolescentes con discapacidad.
El director del INDH, Branislav Marelic, indicó que esos hechos corresponde a una grave vulneración de niños y adultos con discapacidad que se encuentran bajo la tutela del Estado, premisa que fue acogida por el Juzgado de Familia de Buin.
En total, el instituto presentó tres acciones judiciales: un recurso de amparo ante la Corte de Apelaciones de San Miguel, una querella en el Juzgado de Garantía de San Bernardo, y la tercera ante el tribunal de Buin.
Dicha resolución ordena, además, la separación inmediata del equipo técnico del centro, conformado por su director, Gonzalo Recabarren, una sicóloga, una trabajadora social, una terapeuta y un educador de trato directo, quienes -según las pruebas expuestas- aplicaron contenciones físicas extremas a algunos adolescentes y adultos con discapacidad intelectual severa.
