SANTIAGO.- Dos acciones legales presentó Ángela Fuentes contra el Metro y sus funcionarios, luego que en abril pasado terminara esposada a una baranda de la estación de la Línea 5 del Metro tras un altercado con los guardias de seguridad de la empresa.
El hecho se registró específicamente en la estación Santa Isabel, cuando después de intentar pasar al sector de andenes por una salida exclusiva para personas con movilidad reducida, se enfrentó a los guardias de la estación quienes impidieron su actuar.
Para justificar su afán de abandonar la estación por el paso no habilitado, dijo que poco antes del incidente había recibido una inyección en la espalda por una lordosis que padece, por lo cual estaba con mucho dolor y quería salir luego del recinto.
Entre las acciones judiciales se cuenta una querella que busca reparar los daños causados mediante una indemnización, considerando que en su rol de consumidor ella canceló su pasaje como corresponde. La otra de las acciones apunta contra los funcionarios de la empresa que resulten responsables.
La joven que es bailarina y estudia en una academia de baile, llegó hasta el Centro de justicia acompañada de su abogado y un grupo de compañeros de su academia.
El abogado a cargo, Juan Pablo Rivera, dijo que con la acción judicial se pretende buscar responsabilidades en el caso, arriesgando una pena máxima de presidio menor en su grado máximo, pudiendo recibir entre tres años y un día a cinco años.
