SANTIAGO.- El ex ministro de Justicia Carlos Maldonado (PR) se ha convertido en un influyente asesor de la candidatura presidencial de Alejandro Guillier. Para él, el senador debe convertirse en el jefe de la coalición.
Es precisamente ese factor el que, según dijo a
"El Mercurio", ha sido el principal problema de la administración de la Mandataria Michelle Bachelet.
-En las últimas semanas, Guillier ha tenido que salir a contener varias críticas de los partidos. ¿Cuánto puede afectar ese factor en su candidatura?
- Los partidos de centroizquierda han decidido apoyar a un candidato independiente pero que reconoce y valora el rol de los partidos, y yo creo que esa conjunción va a ser virtuosa, y es lo que necesita Chile en esta etapa.
-El senador, sin embargo, ha remarcado su condición de independiente. ¿Cree usted que el bajo apoyo ciudadano a los partidos pueda complicar su campaña?
- Todos los partidos, yo soy militante del PR, tenemos un desafío importante de mostrar disciplina, de contribuir constructivamente a la campaña, de abrirnos mucho más a la ciudadanía. Hay un desafío, por supuesto, pero se va abordar de manera exitosa.
-Desde la Nueva Mayoría se ha cuestionando el liderazgo de Guillier, en medio del debate por la elección de intendentes. ¿Falta que se consolide como un líder al interior del bloque?
-El liderazgo de Guillier en la ciudadanía está claramente consolidado, y en los partidos está en gran medida, también ya logrado. Pero hay todavía etapas que ir avanzando, para que todos los actores políticos relevantes lo reconozcan como el líder del país y el líder de la coalición. El presidente debe ser el líder de su coalición. Yo creo que esa es una cosa que ha faltado en Chile últimamente.
- ¿La Presidenta Bachelet no ha sido líder de la coalición?
-En mi respetuosa opinión, tuve el honor de ser ministro de ella en su primer gobierno, creo que a la Presidenta le ha faltado mayor conducción política y ese mejor trabajo con los partidos que le dan sustento.
- Desde la DC han emplazado al senador a asumir su liderazgo y que ordene a los partidos que lo apoyan. ¿Qué costos puede tener un revés en el proyecto de elección de gobernadores regionales?
-No vamos a pisar ese palito, que algunos quieren poner, que la prueba de fuego es si eligen o no eligen a los gobernadores regionales este año. Yo creo que uno de los problemas que ha habido con varias reformas de este gobierno es que se ha privilegiado la rapidez por sobre la calidad y la adhesión ciudadana.
-Después de haber defendido que la elección se realizara este año, ¿no es un retroceso proponer postergarla para el 2018?
- A mí me parece que muestra un liderazgo responsable, un liderazgo que escucha, un liderazgo que busca hacer las cosas bien, y eso es lo que el país necesita.
- ¿Por qué no ha seguido creciendo la candidatura de Guillier en las encuestas?
-Él tuvo un crecimiento exponencial durante los últimos meses del 2016, que evidentemente no era posible proyectarlo de la misma manera. Ha habido un proceso de ordenamiento de ir sumando las adhesiones de los partidos, un proceso de construcción programática que en la medida en que se transforme en un despliegue, va a volver a generar una dinámica de crecimiento en los próximos meses.
-¿Cuál es la diferencia entre el proyecto que encarna el senador y el del Frente Amplio?
- La gobernabilidad. Es fácil levantar una candidatura testimonial, que hable de lo que la gente quiere escuchar, pero que no tiene viabilidad de llevarse a la práctica. Yo siento que eso es lo que ocurre de manera importante con el Frente Amplio.
- ¿Cómo ve la opción de Carolina Goic?
- Yo creo que la gente no tiene claro cuál es el rol que ella juega y cuál es el espacio que ella pretende llenar. Ese es un problema de la DC, con quienes por supuesto hay que seguir convergiendo.
- ¿Pensando en la segunda vuelta?
- Quizás en la segunda vuelta, quizás antes. La política se va desarrollando día a día.