SANTIAGO.- La fuga de cerca de 14 mil litros de parafina que contaminó el agua del río Mapocho y que provocó el corte de suministro de agua potable este martes y miércoles en las comunas de Vitacura, Las Condes y Lo Barnechea, habría ocurrido el domingo y los responsables no alertaron oportunamente.
Así lo informó el intendente metropolitano, Claudio Orrego, quien llegó este miércoles junto con otras autoridades a la planta de Aguas Andinas ubicada en Camino a Farellones para revisar el avance de la situación.
Allí señaló que "nos parece muy grave lo ocurrido, contaminar dolosa o culposamente el cauce de un río es una situación grave más aún si no se da aviso tanto a la empresa como a las autoridades respectivas oportunamente".
La fuga de hidrocarburos, precisó la autoridad regional, ocurrió el domingo por la noche y fue recién ayer que los trazos de parafina fueron advertidos por Aguas Cordillera gracias a las quejas de los vecinos y sin haber sido alertado previamente por el responsable.
En ese sentido, Orrego explicó que "no va a volver el agua mientras no se resuelva 100% el tema", sin embargo, aseguró que las comunas afectadas sí tendrán acceso a agua potable desde hoy ya que "se está inyectando agua del río Maipo, que es completamente limpia" a las cañerías de los hogares afectados.
Asimismo, detalló que en este momento se realizan las limpiezas de los estanques y de las cañerías, para eliminar cualquier rastro de parafina, y que el siguiente paso será limpiar el cauce del río Mapocho, una tarea compleja que tomará al menos una semana.
Por su parte, el alcalde Las Condes, Joaquín Lavín, calificó de "inaceptable" el hecho y defendió el actuar de Aguas Andinas en la emergencia.
"Aguas Cordillera ha hecho todo correctamente, ha tomado todas las medidas, lo ha hecho bien, este no es un problema de ellos, este un problema que pasó 37 kilómetros más arriba", comentó.
Respecto a la limpieza del Mapocho, Lavín informó que "la limpieza del río propiamente tal la va a hacer Aguas Cordillera, ahora quién va a pagar esa limpieza, eso va a ser un tema después judicial".
Desde Lo Barnechea, el edil Felipe Guevara, explicó que "un litro de combustible contamina mil litros de agua, 15 mil litros de combustible contaminan 15 millones de litros de agua, es de una gravedad enorme".
A pesar de lo anterior, aseveró que "el trauma que se genera en las familias más vulnerables cuando no hay clases había que evitarlo, las mamás dejan de trabajar, los papás dejan de trabajar, se complica toda la rutina de la familia y por eso hicimos el esfuerzo de no suspender las clases".
"No podemos cocinar en ellos (los colegios), por lo tanto los niños recibieron de desayuno una ración que compramos en el mercado, lo mismo para la hora de almuerzo", detalló.
La investigación
Según el superintendente de Servicios Sanitarios, Ronaldo Bruna, una vez que se termine la etapa de la emergencia, en el que se están asegurando el restablecimiento del agua potable, comenzarán la etapa de la investigación "para ver cuáles son las responsabilidades que corresponden acá y así vamos a llevar todos los antecedentes que tengamos al Ministerio Público para hacer una denuncia".
La hipótesis que se tiene hasta el momento de lo que sucedió proviene de una declaración de una empresa particular, el Centro de Esquí La Parva, que afirma que parte de sus instalaciones se vieron afectadas y producto de eso se habría derramado parafina en un afluente del río Mapocho.
El subprefecto Marco Fierro, jefe de la Brigada Investigadora de Delitos contra el Medio Ambiente y Patrimonio Cultural, comentó que, tras acoger la denuncia de Aguas Cordillera, "en este momento nosotros estamos trabajando en el lugar a objeto de poder determinar varias aristas".
"Principalmente, de los 15 mil litros que tenía el estanque de parafina en La Parva, nosotros tenemos que determinar qué cantidad de ese combustible o de ese hidrocarburo llegó efectivamente al lecho del río. De esa manera vamos a poder dimensionar y cuantificar cuánto realmente contaminó las aguas que en este caso trata Aguas Cordillera", añadió.
En ese sentido, precisó que la investigación está enfocada en la infracción del artículo 291 del Código Penal, que determina presidio menor en su grado máximo a quien derrame alguna sustancia que ponga en peligro la vida y salud vegetal y animal, y el abastecimiento de la población. Esto, adicional a las multas que puedan llegar desde organismos estatales.
