Hoy culminaron los preparativos para la Cuenta Pública.
Agencia Uno
VALPARÁISO.- Cortes de tránsito, suspensión de clases para todos los colegios, desvíos de la locomoción colectiva y el cierre del Rodoviario, son algunos de los efectos que tiene la Cuenta Pública Presidencial en Valparaíso.
Si bien algunas de estas medidas se han tomado años antes, esta vez tienen una repercusión especial, debido al traslado del discurso desde el 21 de mayo que es feriado al 1 de junio que es hábil.
Esto provocó una preocupación adicional para la comuna, que mañana vivirá su prueba de fuego desde las 7:00 horas.
Se supone que esto también tiene un beneficio y es que al no ser día laboral se espera que llegue una menor cantidad de manifestantes al puerto, quienes habitualmente marchan en paralelo a la Cuenta Pública. Y este año no será la excepción.
Sin embargo, en Valparaíso comenzó a plantearse la necesidad de que el 1 de de junio se declare feriado local.
"Esperamos que (el cambio de fecha) no genere una mayor alteración de la ciudad, asumiendo que se debiera evaluar si para las próximas ocasiones será necesario tomar otro tipo de medidas, como declarar feriado o postergar la hora de inicio de algunas actividades", dijo el alcalde Jorge Sharp en entrevista con La Tercera.
Haciendo eco al llamado, la diputada Andrea Molina (UDI) redactó un proyecto que, espera, cuente con el respaldo transversal y esté vigente desde 2018.
"Creo que es de sentido común plantear la necesidad cierta de generar un feriado (...) Estamos trabajando para una mejor calidad de vida, producto de lo que se genera a raíz de la cuenta pública, para resguardar a la comunidad", expresó.
"Estamos viendo una realidad que, no siendo mañana feriado, la comuna se ve absolutamente colapsada y la gente ni siquiera podrá tomar locomoción donde la tomaba, o las familias tendrán que coordinar con quién dejar a sus hijos que no podrán ir al colegio", argumentó la parlamentaria.
