Jonathan Mancilla, El Mercurio
SANTIAGO.- Gran polémica ha causado la respuesta que dio la precandidata presidencial del Frente Amplio, Beatriz Sánchez, durante una entrevista para Revista Paula.
La interrogante fue si se sentía cómoda con el modelo de Salvador Allende, a lo que la periodista contestó que prefería "un Estado que no sea totalitario".
Esta mañana, luego de que aparecieran las primeras críticas por la frase, Sánchez se retractó de sus dichos, aclarando que intentó "adelantarse" a la "eterna caricatura al Frente Amplio".
"Me equivoqué", expresó a través de Twitter, agregando que Allende le parecía "inspirador" para sus desafíos y una figura con la que comparte un "sueño de justicia con democracia y libertad".
Las reacciones que generaron ambas respuestas se pueden dividir en dos grandes corrientes: quienes construyen un respaldo cerrado a la precandidata y quienes la critican en duros términos.
La defensa
El círculo de hierro de Sánchez fue el primero en levantar la voz para respaldarla. El diputado Gabriel Boric (Movimiento Autonomista) aseguró que, a pesar de que la precandidata se había equivocado, haber reconocido su error "en política, engrandece".
También criticó que la Nueva Mayoría se alzara a criticar, señalando que el apoyo al ex Presidente por parte del conglomerado llegaba "un poco tarde".
Quien también defendió a Sánchez fue el diputado de Revolución Democrática Giorgio Jackson, que aseguró que el hecho de que Sánchez se hubiera retractado de sus dichos le parecía una muestra de "humildad, sinceridad y valentía".
Otro que se sumó al respaldo fue el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp (Mov. Autonomista), quien no condenó que la precandidata "se equivocara" y reafirmó su apoyo de cara a la elección de mañana.
Las críticas
Desde el ala más izquierda de la Nueva Mayoría, hubo acuerdo con respecto a la condena de los dichos de la precandidata del Frente Amplio.
La propia hija del ex Presidente y senadora por Atacama, Isabel Allende (PS), calificó como "lamentables" e "inexcusables" las declaraciones de Sánchez.
A sus etiquetas se suman las emitidas por el ex ministro Marcelo Díaz (PS): "incomprensible" y "profundamente errado".
Por su parte, la vocera de Alejandro Guillier, Karol Cariola (PC), se mostró "triste" por las declaraciones de la precandidata, afirmando que las había leído "mil veces" y "aún no lo podía creer".
La diputada Maya Fernández (PS) afirmó que querría creer que Sánchez "pensaba en Pinochet cuando se refirió a Salvador Allende como totalitario".
También el ex vocero de Gobierno y líder del Partido Socialista, Álvaro Elizalde, manifestó que consideraba al ex Presidente como "un ejemplo de consecuencia democrática", siendo tajante para expresar que "Allende y totalitario no caben en la misma frase".
