VALPARAÍSO.- Un verdadero quiebre se ha producido en el Congreso luego de que ayer la
Cámara de Diputados rechazara el informe de la
Comisión de Sename II, que entre otras cosas, acusaba de "negligencia inexcusable" a la ex ministra de Justicia
Javiera Blanco.
El único parlamentario oficialista que aprobó el documento fue el PPD
Ramón Farías, quien después de la votación lanzó duras acusaciones de un lobby "espantoso" por parte del Gobierno, apuntando a una estrategia de
La Moneda para proteger a la ahora integrante del
Consejo de Defensa del Estado (CDE).
Los cuestionamientos también se extienden a aquellos que habían anunciado una determinada forma de votar antes de la discusión en la Sala. Sin embargo, a la hora de sufragar no concretaron su palabra.
Uno de los casos que más llamó la atención es el de la diputada
Camila Vallejo (PC), quien integraba la comisión investigadora que redactó el documento. Cuando aún se tramitaba en esa instancia, la parlamentaria expuso su respaldo a los párrafos referidos a la responsabilidad de Blanco y, apelando a un incumpliento transversal de los Gobiernos, respaldó el informe.
Ayer Vallejo se abstuvo. "Somos protagonistas de una escena vergonzosa donde el debate de fondo se reduce a pequeñeces, a intereses políticos mezquinos, y nosotros, como bancada del Partido Comunista independiente
no estamos disponibles para alimentar este circo en el que han convertido esta discusión".
Este argumento ético es el mismo que Vallejo expuso cuando se realizó la interpelación de la ex titular de Justicia, con una intervención que es recordada por el
llanto de la diputada al explicar cómo viven los niños en los hogares del organismo.
El diputado
DC Fuad Cahín, también es parte de la polémica. Esto porque ayer por la mañana en declaraciones a la prensa había anunciado que pese a lo que haría el resto de su bancada, él votaría a favor del informe.
Pero al momento de votar en la Sala sorprendió al anunciar un pareo. Al ser consultado al respecto aseguró que tenía un "pacto de caballeros" con
Pedro Browne (Amplitud).
"En todo caso, el efecto es exactamente el mismo porque el diputado Browne quería votar en contra y yo quería votar a favor", explicó Chahín quien descartó sentir "presiones" del Gobierno.
Algo similar ocurrió con el también
DC Aldo Cornejo, quien había comentado en su entorno que votaría a favor, pero finalmente recurrió al pareo.
