SANTIAGO.- En el Juzgado Oral en lo Penal de Cañete, Región del Biobío, comenzó hoy el juicio contra los ocho comuneros mapuche acusados por el atentado incendiario que destruyó cuatro máquinas forestales y una camioneta en el fundo Callimpalihue.
Se trata de Dionisio Quiñelen Antileo (44), Miguel Ángel Llanquileo Cona (23), Rodrigo Meliman Lincopi (26), Juan Meñaco Paine (37), César Millanao Millanao (20), Juan Acricio Chule Porma (49), Nicolás Railaf Ahumada (22) y el menor R.C.P.H. (17).
Todos están acusados por los delitos de incendio, robo con intimidación, receptación e infracción a la Ley de Armas, por lo que el Ministerio Público solicitará penas de hasta 20 años de cárcel
Los hechos ocurrieron cerca de las 22:00 horas del 12 de agosto de 2016, cuando Carabineros recibió la alerta sobre un incendio en el fundo Callimpalihue, ubicado al norte de la comuna de Cañete en la Provincia de Arauco.
En el lugar, ocho encapuchados armados obligaron a los trabajadores a abandonar los vehículos y, luego de sustraer sus especies personales, rociaron con combustible la maquinaria y le encendieron fuego.
Carabineros de la Prefectura Arauco iniciaron de inmediato las diligencias, logrando en menos de media hora la detención de los presuntos autores del hecho e incautando diversas evidencias, entre ellas, armas, municiones, líquidos acelerantes, equipos portátiles y vestimentas.
Además, durante el peritaje en el sitio del suceso fueron encontrados panfletos alusivos a la situación judicial de comuneros mapuches recluidos en cárceles de Lebu, Temuco y Nueva Imperial y en los cuales el grupo Weichan Auka Mapu se adjudicaba el hecho.
Un dato relevante es que tras las indagaciones se determinó que una de las armas incautada a uno de los detenidos también fue utilizada en al menos otros seis atentados ocurridos en la región de La Araucanía, entre ellos el ocurrido en 2013 en el que falleció el matrimonio Luchsinger Mackay.
El arma en cuestión, corresponde a la pistola marca Famae, modelo FN750, con un cargador y nueve municiones sin percutir, incautada a Rodrigo Melimán Lincopí, el mismo sujeto detenido anteriormente tras el atentado incendiario al fundo San Guillermo, absuelto conforme a dictamen del Juzgado Oral en lo Penal de Cañete.
De los acusados, cinco se encuentran en prisión preventiva, dos en libertad condicional con arresto domiciliario total y uno con arresto domiciliario nocturno.
Las jornadas de juicio oral se extenderán por dos semanas y contempla la participación de 82 personas entre víctimas, detenidos, testigos y peritos.