VALPARAÍSO.- Una hora menos de lo inicialmente estipulado duró la interpelación al ministro del Interior, Mario Fernández, quien llegó hasta la Cámara de Diputados, convocado por Chile Vamos para que explicara el proyecto de ley de migraciones.
La sesión, que se realizó en paralelo al partido de Chile contra Bolivia con una alta presencia de parlamentarios en la Sala que participaron activamente de la cita, se centró en que el representante del Gobierno explicara las diferencias entre el proyecto enviado la semana pasada elaborado por la Presidenta Michelle Bachelet y el redactado en 2013 por el ex Mandatario Sebastián Piñera que "durmió" en el Congreso bajo la administración actual.
Según explicó el titular de Interior en materia de expulsiones, las diferencias son standard a nivel internacional, sin embargo "hay una diferencia esencial".
"Hay una enumeración precisa de los delitos por lo que una persona puede ser expulsada y una diferencia más importante aún es la existencia explícita del debido proceso para los inmigrantes que en el otro proyecto no estaba", dijo Fernández explicando que eso permitiría que se pueda expulsar a un extranjero de manera "discrecional".
Así entonces, según enfatizó en la nueva iniciativa se busca un proceso "justo y racional" para los inmigrantes. Además indicó que hay una distinción en el "enfoque" en la manera en que se redactó.
"Desde luego que el propio fenómeno de las migraciones cambió mucho en tres años, por lo tanto el otro proyecto estaba prácticamente desfasado. Pero en segundo lugar, es el enfoque que tenía el otro proyecto: hay una serie de temas que se dan en cualquier otra parte del mundo, pero el enfoque nuestro Gobierno no lo comparte, porque era un enfoque más bien restrictivo que no recogía las obligaciones que Chile tiene en sus tratados firmados y vigentes, tampoco una serie de garantías procesales que deben tener los migrantes ni deberes", sostuvo el ministro.
En tanto su interpeladora, la diputada Paulina Núñez (RN) aseguró a que gracias a esta acción "hoy día tenemos un proyecto para discutir" y llamó al Gobierno a no quitarle la suma urgencia con la que se presentó para que siga siendo prioridad en las labores legislativas del Congreso.
"Parece que el ministro yo no sé si no escuchaba o no entendía lo que le estaba preguntando, pero cuando le preguntamos por qué no se ingresó una indicación sustitutiva, y si derechamente era porque tenía la firma de Sebastián Piñera, se da vueltas y vueltas y la verdad es que no dice la verdad. (Él dijo) que la realidad es que hace tres años atrás no estaba con la urgencia que ahora amerita, pero en 2013 ya se indicaba que Chile era el país en donde más habían aumentado más la inmigración que el resto de los países de Sudamérica", declaró.
La representante de Antofagasta en la Cámara añadió que "hay otra ignorancia total o falta de información de parte del Ejecutivo" al no convocar un consejo de ministros -según reconoció Fernández- que por decreto estaba mandatado y la única vez que se reunió fue cuando el ex ministro Jorge Burgos citó a los otros integrantes para constituirlo.
El proyecto contempla un gasto para el Estado de $134 mil millones, y según anunció Fernández, el número total de extranjeros que residen en Chile se conocerá el próximo año en abril, cuando el Instituto Nacional de Estadísticas revele los datos del Censo.