"Es muy grave lo que pasó con los Luchsinger, porque son gente conocida, que ha estado en mi casa, son gente cercana. Entonces por qué yo debía meterme en esa cosa", señaló la machi ante el tribunal.
El Mercurio (Archivo)
SANTIAGO.- "Yo no tengo ningún problema con los Luchsinger. Pasé nueve meses en la cárcel y no debía estar ahí, porque esto es una mentira".
Las palabras son de la machi Francisca Linconao, imputada en el crimen del matrimonio Luchsinger MacKay, ocurrido en enero de 2013 y que hoy vive su último día de juicio oral, en Temuco.
La mujer, de 57 años, rechazó las acusaciones de la Fiscalía Regional de La Araucanía y desmintió que se haya realizado una reunión de coordinación en su domicilio, horas antes del doble asesinato e incendio.
"Soy inocente. Esa reunión de que está hablando la Fiscalía, es falso, es mentira. Son calumnias que me han inventado. Jamás hubo una reunión en mi casa. Yo eso se lo juro ante Dios, porque Dios está escuchando. Soy machi y a mí no me gusta mentir", dijo mirando a los magistrados del Tribunal Oral en Lo Penal de la capital regional.
La imputada añadió que "es muy grave lo que pasó con los Luchsinger, porque son gente conocida, que ha estado en mi casa, son gente cercana. Entonces por qué yo debía meterme en esa cosa. Nunca. Yo no tengo mala conducta. Es primera vez que me involucran en una muerte tan terrible".
Con esta intervención el juicio oral fue cerrado por el Tribunal Oral en Lo Penal de Temuco y entregará su veredicto a las 10:00 horas de este miércoles.