El alcalde Echeverría no fue recibido en La Moneda.
Álex Moreno, El Mercurio
SANTIAGO.- El alcalde de San Joaquín, Sergio Echevería (PPD), lamentó este jueves la decisión del Gobierno de no recibirlo y suspender una reunión en la que se abordaría la operación para derribar los muros que protegen a bandas narcos en la Población La Legua, la cual fue detenida por el municipio por no contar con los permisos necesarios.
Al respecto, el edil explicó que “fui citado a una reunión y cuando venía camino a La Moneda, a última hora, me dijeron que se suspendía, dado que el municipio dictó una orden de paralización de faenas no tenía sentido conversar con el municipio. Eso es un grave error, un Gobierno que no escucha no está haciendo las cosas bien”.
“No puede el Gobierno pretender a última hora tener una imagen de que ha hecho mucho por La Legua y empezar a hacer las cosas mal. Sentémonos a conversar responsablemente”, pidió el jefe comunal.
Según explicó Echeverría, “nosotros hemos sostenido reuniones con autoridades de gobierno y con el intendente Orrego y les hemos manifestado que nosotros estamos de acuerdo en términos estratégicos, en que para enfrentar a las bandas de narcotraficantes hay que derribar los muros”.
“Pero esto hay que hacerlo de manera gradual, en el marco de un Estado de Derecho y sobre todo resguardando la vida de las personas inocentes que están en la población. No puede ser que por operaciones comunicacionales mal diseñadas todo un trabajo previo se tire a la borda”, fustigó.
El alcalde sostuvo que “no es justificable de que hoy día se inicien estos trabajos sin que el municipio haya sido notificado y sin permiso de edificación de obra. El resultado es el que tenemos hoy día, que hay cinco personas detenidas que son decentes e inocentes de La Legua”.
“No es la forma de hacer las cosas. Por tanto, yo hago un llamado al subsecretario del Interior a que se reúna con el municipio y concordemos un plan razonable de apertura, porque estamos todos de acuerdo en la idea fundamental, pero esto no puede ser a costa de poner en riesgo las vidas de personas inocentes”, recalcó.
Asimismo, criticó “la premura del Gobierno de que hay que hacerlo ahora ya, parece más bien una lógica comunicacional que la lógica de un trabajo serio y responsable que proteja la vida de las personas. Por tanto, lo que hizo el municipio fue dictar una orden de paralización de obras, porque no se ingresó ninguna solicitud”.
“Esto es totalmente absurdo, porque si alguien va a iniciar una obra, tiene que tener el permiso correspondiente y ellos no lo tienen. Por tanto, hago un llamado al Gobierno a que converse con el municipio, que somos los representantes legítimos de la comunidad”, concluyó.