Los alegatos en el tribunal de alzada de la ciudad.
Aton
SANTIAGO.- La Corte de Apelaciones de Puerto Montt rechazó hoy los recursos de nulidad presentados para dejar sin efecto la sentencia del juicio que absolvió a Jaime Anguita Medel del crimen de su esposa VivianaHaeger, y que condenó al carpintero José Pérez Mansilla a 10 años de cárcel.
El 28 de septiembre pasado, en fallo unánime, los tres jueces del Tribunal Oral Penal de la ciudad desestimaron la responsabilidad del ingeniero en en delito de parricidio en calidad de autor inductor.
Dos días después, el fiscal adjunto de Puerto Varas, Naín Lamas; el abogado querellante Sergio Coronado, quien representó en el juicio a la madre de Viviana Haeger, Delia Masse; y el abogado de Pérez, Carlos Jiménez, presentaron dichos recursos ante el tribunal de alzada.
En su fallo absolutorio, los jueces Patricia Miranda Alvarado, Andrés Villagra Ramírez y Rosario Cárdenas Carvajal expresaron que no llegaron a la convicción de la culpabilidad de Anguita Medel por "falta de contundencia" de las pruebas.
De acuerdo a la parte medular del fallo, leído por el juez Villagra, "la prueba de cargo no fue idónea para superar la racionalidad de la duda”, adoleció de "falta de contundencia”, por lo que el delito imputado a Anguita "no se determinó en la forma exigida más allá de toda duda razonable".
Los jueces advirtieron que la declaración del carpintero sobre el supuesto pago de $2 millones por parte de Anguita para cometer el crimen, resultó "carente de suficiencia" por lo que fue descartada.
En cambio, los jueces llegaron a la convicción de la participación de Pérez Mansilla en el crimen cometido en junio de 2010 en Puerto Varas, pero no como autor de homicidio calificado por premio o promesa remuneratoria, como acusó la fiscalía, sino que como autor del delito de robo con homicidio, como recalificaron los magistrados.
Según la fiscalía, el crimen fue un "encargo criminal que, por su naturaleza, no dejará más rastro que los propios dichos del imputado. En ese sentido, se imponen exigencias que no son consideradas en doctrina ni jurisprudencia comparada".
La víctima murió junio de 2010, tras ser asfixiada con una bolsa plástica. Su cuerpo fue ocultado en una buhardilla y encontrado semanas después del crimen.
