SANTIAGO.- También fueron seis los nombres que se repitieron el pasado 23 de enero, cuando el Presidente electo, Sebastián Piñera, hizo el primer nombramiento importante para su segundo gobierno: los 24 ministros que lo acompañarían.
De ellos, tres retornaron a sus antiguos ministerios y otros tres volvieron al gabinete, pero en otros puestos. Se trata de un fenómeno conocido extraoficialmente como "repetirse el plato", que instaló en 2006 la Presidenta Michelle Bachelet para referirse a ex autoridades que vuelven al equipo de gobierno.
Hoy, después de que Piñera diera a conocer el nombre de sus 36 subsecretarios a través de redes sociales, se confirmó que también serán seis quienes se "repitan el plato", cuatro en sus carteras y dos en áreas en las que debutarán.
Los que vuelven a sus ex oficinas
En primer lugar está Rodrigo Ubilla, uno de los nombres que sonaban con anterioridad para ocupar el puesto de subsecretario del Interior. Ubilla entró al gobierno en el cambio de mando de 2010.
El sociólogo fue uno de los que se mantuvo en su cargo hasta el final del gobierno, a pesar de los problemas que tuvo que enfrentar en la cartera, entre ellos el propio terremoto, y también tuvo un rol importante dentro del equipo de campaña de Piñera.
Otro que retornará es Claudio Alvarado, la dupla de Ubilla, que volverá a la Subsecretaría General de la Presidencia. También se mantuvo en el cargo durante todo el primer gobierno de Piñera, donde trabajó codo a codo con Cristián Larroulet.
También es el caso de Lucas Palacios, ex subsecretario de Obras Públicas, que este 11 de marzo volverá a su antigua oficina. Aunque empezó como asesor dentro de la Dirección de Presupuesto, en 2012 pasó a la cartera que ahora retomará.
Durante la campaña, Palacios se desempeñó como jefe territorial. Ha trascendido que el futuro titular de la cartera, Juan Andrés Fontaine, fue quien solicitó directamente trabajar con Palacios durante esta administración.
Alfonso Silva también regresará a Cancillería, donde se desempeñó durante el segundo tiempo del gobierno de Piñera. Su nombramiento es uno de los que los expertos señalaban como clave, debido a la sorpresiva nominación de Roberto Ampuero como ministro.
Silva, quien ha sido embajador en Canadá, India y Jamaica, ya tuvo que enfrentar el juicio con Perú en La Haya. Después del término del gobierno, el diplomático ha trabajado como coagente en el equipo jurídico que revisa la demanda boliviana.
En la Subsecretaría del Trabajo, Fernando Arab será el encargado de tomar la posta. En 2013, el abogado fue designado para el mismo cargo, cuando tenía 31 años.
Por último, en este gobierno también regresará Rodrigo Benítez a Medio Ambiente, quien ingresó inicialmente como jefe de la División Jurídica.
El abogado se desempeñaba, en ese momento, como profesor de Derecho Ambiental en la U. Católica y la U. Finis Terrae.
Los que regresan a otras carteras
Además de los primeros cuatro, hay tres nombres que formaron parte del primer gobierno en una subsecretaría, pero hoy retornarán a otra.
Es el caso de la abogada Carol Bown, quien fue subsecretaria de Carabineros y uno de los miembros más jóvenes del gabinete.
En 2011 dejó el cargo para integrarse al equipo del entonces Mideplan y actual Ministerio de Desarrollo Social, donde fue parte de la reestructuración del Servicio Nacional de Menores.
9 Ex subsecretarios volverán al gabinete
Hoy, Piñera la nombró como subsecretaria de la Infancia, cargo que aún no se implementa pero que el Presidente electo decidió nombrar igualmente.
También volverá el ingeniero comercial y ex subsecretario para las Fuerzas Armadas, Alfonso Vargas, quien además ha sido alcalde de Nogales y diputado.
Durante un breve periodo, entre la renuncia de Jaime Ravinet y la llegada de Andrés Allamand, asumió interinamente como ministro de Defensa.
A partir del 11 de marzo, Vargas tomará el mando de la Subsecretaría de Agricultura.
Otro que regresará es Ricardo Irarrázabal, ex subsecretario de Medio Ambiente que ahora aterrizará en Energía. El abogado ha sido vicedecano de la Facultad de Derecho de la U. Católica y también se desempeñó como director ejecutivo del Servicio de Evaluación Ambiental.
