Mario Quilodran, El Mercurio (Archivo)
SANTIAGO.- Pasadas las 19:15 horas se retiró
Celestino Córdova de la localidad de Lleupuco, comuna de Padre Las Casas. Lugar en el que participó - a través de un permiso especial de Gendarmería - de la ceremonia de renovación de su rehue.
El condenado a 18 años de cárcel por el asesinato del matrimonio Luchsinger Mackay en 2013 abandonó el lugar bajo las estrictas medidas de la cápsula de seguridad, compuesta por 150 uniformados y patrullaje aéreo.
Más de 20 vehículos integraron la caravana que lo llevaron de regreso al Hospital Intercultural de Nueva Imperial debido a su delicado estado de salud. El machi había mantenido una huelga de hambre líquida por más de 50 días.
El general Andrés Gallegos explicó que en el lugar donde se realizó el rito sagrado estuvo planificado en tres perímetros de seguridad. "El primero y la seguridad del reo se encuentra a cargo de Gendarmería. De acuerdo a lo solicitado por ellos, nosotros estamos desplegando personal en lo que es el segundo y tercer perímetro para que el resguardo se lleve sin ningún problema".
En el ritual fueron autorizadas 30 de las 300 personas que habían solicitado asistir. Éste fue observado además por representantes del Instituto de Derechos Humanos y una alta comisionada de Naciones Unidas.
