EMOLTV

Ópticas descartan que vayan a "sobre-recetar" lentes tras fallo que les permite indicarlos

Ésa es una de las aprensiones que manifestó la Sociedad de Oftalmología ante la decisión del TC. Las ópticas lo niegan y afirman que pueden contribuir a reducir las listas de espera en el país.

21 de Noviembre de 2018 | 11:36 | Por Natacha Ramírez, Emol
imagen

No sólo oftalmólogos: En Chile los tecnólogos médicos y optómetras también pueden recatar lentes ópticos.

El Mercurio
SANTIAGO.- La posibilidad de que las ópticas "sobre-diagnostiquen" problemas oculares y "sobre-receten" lentes, con el fin de realizar más ventas, es uno de los principales riesgos que ve la Sociedad Chilena de Oftalmología tras el fallo del Tribunal Constitucional (TC) que declaró inconstitucional la prohibición de que se puedan recetar anteojos al interior de ópticas.

La decisión del TC rige para dos casos de particulares que recurrieron a ese organismo para solicitarle que se prenunciara al respecto, pues habían sido sancionados por la autoridad sanitaria; aunque podría abrir la puerta a que se presentara un requerimiento por inconstitucionalidad general de la norma.

$5.000vale la consulta en una óptica
Actualmente, algunas ópticas ya cuentan con consultas oftalmológicas –donde tecnólogos médicos y optómetras chequean y entregan recetas a las personas–, pero funcionan en recintos separados, que es lo que permite la ley.

Según la Sociedad Chilena de Oftalmología, "el Tribunal, sin saberlo a lo mejor, ha dado luz verde a la mercantilización de la salud ocular de la población" y advierte que el profesional de salud que trabaje para la óptica podría "verse inducido a sobre-diagnosticar vicios de refracción y sobre-recetar a raíz que, dado que siendo un trabajador dependiente del establecimiento de óptica, su remuneración podría depender del volumen de venta de lentes ópticos".

Desde las ópticas descartan de plano esa posibilidad. "Eso no lo acepto bajo ningún punto de vista, porque se está emitiendo un juicio de valor respecto a la manera en que nosotros actuamos", afirma a Emol el gerente general de Rotter & Krauss, Juan Cristóbal Marchena –quien también es presidente Cámara de la Industria Óptica de Chile (CIOP)–.

El ejecutivo remarca que los tecnólogos médicos y optómetras cuentan con un "protocolo de ética" profesional, que les impide realizar ese tipo de prácticas; y aclara que éstos no reciben incentivos económicos por el número de recetas que extienden, sino que tienen un sueldo fijo y se les bonifica por la cantidad de atenciones que realizan. "Es totalmente falso que nuestros profesionales reciban incentivos económicos para derivar a la óptica", asegura.

También explica que las personas pueden utilizar esa receta en cualquier óptica, teniendo la posibilidad de cotizar. De hecho, señala que, del número total de atenciones que realizan, sólo un bajo porcentaje termina comprando los lentes en la misma óptica. "Hay un porcentaje muy importante de las recetas que nosotros emitimos que finalmente no tomamos en una venta. O sea, en la práctica, no estamos capturando más recetas que nuestra participación de mercado. Ése es un indicador bastante objetivo", afirma.

Creen que pueden ser parte de la "atención primaria" en salud ocular


Marchena sostiene que "lo que estamos haciendo es poner a disposición un servicio para la población", facilitando el acceso a las consultas –el valor es de unos $5.000– "y eliminar el monopolio de tener que ir a un oftalmólogo para hacerse una refracción visual, que al final es la misma que hace el tecnólogo, con el mismo equipamiento".

Afirma que la resolución del TC abre la posibilidad de que estas atenciones se puedan ampliar, potencialmente, a las cerca de 1.400 ópticas que hay en el país, ayudando a reducir las largas listas de espera que hay en el sistema público, ya que –señala– las ópticas podrían pasar a ser una suerte de "eslabón de la salud primaria" en atención ocular.

El ejecutivo cree que esto podría ser un aporte sobre todo en los lugares apartados, donde hay déficit de oftalmólogos. Comenta que en Chiloé, por ejemplo, "la gente nos manifiesta que hemos solucionado un problema gigante, ya que la consulta se encarecía porque además involucraba un viaje hasta Puerto Montt".

También remarca que lo que se autorizó en Chile es algo que ocurre en todos los países de la OCDE –con excepción de Francia–. "Cuando vas a cualquier país desarrollado del mundo se puede hacer el proceso de chequeo visual y comprar directamente los anteojos en la óptica. Por lo tanto, esto no es algo totalmente nuevo, estamos implementando regulaciones que se llevan a cabo en todos los países de la OCDE", subraya.
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?