SANTIAGO.- Apenas empezaron a aparecer las llamas en las laderas del cerro San Cristóbal, pasadas las 10 de la noche de este domingo, una única preocupación colonizó las redes sociales: el estado de los más de mil animales que habitan el recinto del Zoológico Nacional, ubicado en las faldas del cerro.
"Salven a los animales del zoo", "¿Se supo algo de los animales del zoológico?", "Me ofrezco para ayudar en lo que sea", se leía en Twitter. Mientras, el avance de las llamas se podía observar desde distintos puntos de la capital. La primera respuesta llegó minutos después de la medianoche.
"Si bien el incendio no ha llegado al Zoológico Nacional, estamos evacuando de manera preventiva a nuestros animales", afirmaba la directora (s) del Parque Metropolitano, Alejandra Montalba en un video desde el cerro.
"Ya está todo el equipo acá instalado en el zoológico. Agradecemos a todos los que quieren venir a ayudar, pero estamos trabajando bien, de manera coordinada, muy tranquilos, esperando que todo salga bien", añadía la autoridad.
Lejos de calmar la ansiedad, el comunicado solo generó más dudas: ¿Hacia dónde se estaban evacuando los animales? ¿Cómo se ejecutaba la evacuación de la especies de mayor tamaño? ¿Qué pasaba con las jirafas, los elefantes, los leones?
Esta mañana, cuando el humo todavía salía de la tierra del San Cristóbal, Montalba y el ministro (s) de Vivienda, Guillermo Rolando, entregaron algunas respuestas. El fuego, de cuyo inicio se sospecha "intencionalidad", afectó a una superficie por confirmar de dos hectáreas y fue contenido por Bomberos, aunque con algunos focos activos.
"Otro de los temas esenciales, estando acá en el Parque Metropolitano, es el zoológico. Afortunadamente (no hubo) ninguna afectación respecto de animales", explicó el titular (s) de la cartera. "Se llevó adelante un trabajo preventivo que es parte del protocolo".
Las dudas continúan: ¿Cuál es ese protocolo?
La evacuación preventiva
"Como Zoológico Nacional, tenemos un protocolo de emergencia ante estas situaciones y por supuesto ayer quisimos actuar de manera preventiva, por lo tanto evacuamos preventivamente a algunos animales que estaban más cerca del borde del zoológico", explicó la directora (s) de Parquemet esta mañana.
La evacuación comenzó con los animales cercanos al perímetro del recinto, que están categorizados internamente de acuerdo a su grado de amenaza en la naturaleza, individualizando los que están en proyectos de conservación o de manejo reproductivo cooperativo a nivel mundial. "Esos son los animales que primero rescatamos y después por supuesto al resto de animales", explicó.
La operación fue interna. Con ayuda de personal del Buin Zoo y de Parque Safari, los animales fueron llevados hasta la ladera oriente del zoológico, donde se encuentra la clínica veterinaria, y permanecerán ahí hasta que esté completamente controlado el incendio.
"Tenemos un protocolo de emergencia ante estas situaciones y por supuesto ayer quisimos actuar de manera preventiva, por lo tanto evacuamos a algunos animales que estaban más cerca del borde del zoológico"
Alejandra Montalba, directora (s) Parquemet
Las especies evacuadas fueron el panda rojo, el lemur rufus, el gato colo colo y ranas de darwin, que fueron evacuados a través de "recintos" o cajas especializadas. La preocupación estaba enfocada en aquellos animales en peligro de extinción, cuenta a Emol el gerente de Zoología del Buin Zoo, Alberto Duarte, que participó de la operación.
A pesar de que la evacuación preventiva fue exitosa, queda la duda con respecto a cómo se manejaría una emergencia mayor si llegara a amenazar a especies más complejas por su tamaño, como las jirafas y elefantes, o por su nivel de peligrosidad para el ser humano, como el caso de los leones y tigres.
Duarte, en su experiencia con el Buin Zoo, explica que el trabajo es difícil de llevar a cabo por la gran variedad de ejemplares que habitan en un zoológico, que deben ser preservadas en su totalidad, desde un arácnido hasta una jirafa.
Por eso, asegura, el trabajo debe enfocarse en contener y apagar el fuego lo antes posible, y en usar otros "métodos paliativos" que ayuden a disminuir el riesgo, como regar los predios o impermeabilizar los recintos.
Las exigencias del SAG
Según un documento del Servicio Agrícola y Ganadero al que Emol tuvo acceso, llamado "Criterios técnicos para la mantención y manejo de fauna silvestre en cautiverio", que norma a todos los establecimientos de fauna silvestre a nivel nacional inscritos o que deseen inscribirse en el Registro Nacional de Tenedores de Fauna, existe obligación de contar con un Plan de Reacción Frente a Emergencias (PRE).
"Es un conjunto de normas y procedimientos destinados a enfrentar y controlar una situación de emergencia", señala el documento. "Este plan entrega directrices y pasos a seguir en caso de ocurrir una emergencia que pueda ocasionar lesiones o que ponga en riesgo la vida de las personas o de los animales".
"El protocolo deberá indicar las acciones a seguir, rangos de responsabilidad para cada uno de los trabajadores, medidas de protección para las personas, medidas de protección para los animales, sistemas de comunicación interno y con instituciones de bien público"
SAG
De acuerdo al análisis del SAG, las principales emergencias en estos establecimientos son la fuga de especies, los ataques de animales a personas, los ataques de animales externos al recinto, los desastres naturales y el vandalismo.
El plan debe categorizar a los animales según su peligrosidad y considerar un "Protocolo de reacción frente a desastres naturales y problemas de origen antrópico" (PRDNA). Dichas disposiciones buscan dar respuesta a la ocurrencia de terremotos, tsunamis, inundaciones, sequías y también incendios.
"El protocolo deberá indicar las acciones a seguir, rangos de responsabilidad para cada uno de los trabajadores, medidas de protección para las personas, medidas de protección para los animales, sistemas de comunicación interno y con instituciones de bien público", especifica.
Además considera la existencia de instalaciones que "eviten o minimicen" la ocurrencia de estas situaciones, como los cortafuegos con los que cuenta el Zoológico Nacional.
