Poco después de que el Gobierno manifestara sus reparos al informe publicado este jueves por
Amnistía Internacional, y que denuncia una serie de violaciones de derechos humanos en el país, tanto
Carabineros como las
Fuerzas Armadas se plegaron al rechazo expresado por el Ejecutivo.
Las primeras en reaccionar fueron las tres ramas de las FF.AA., las que a través de un comunicado conjunto cuestionaron las conclusiones a las que llegó el organismo en su documento.
"Rechazamos categóricamente las afirmaciones del informe que señalan que habría existido 'Una política de ataques generalizados contra manifestantes', ya que no existió, ni existe ninguna política de las FF.AA. para dirigir ataques generalizados o sistemáticos contra la población civil. Por ello, la extensa denuncia de Amnistía Internacional no contiene ninguna prueba directa o indirecta, de una orden, un acuerdo, o siquiera una insinuación de las FF.AA. en este sentido". señalan.
En ese sentido, subrayaron en que su actuación "fue requerida" por el Presidente Sebastián Piñera, con el objetivo de contener "los ataques generalizados cometidos por grupos no identificados y que están siendo investigados, contra los medios de transporte público y los establecimientos que permiten el abastecimiento vital de la población".
"Tampoco es cierto que durante el período que rigió el Estado de Excepción Constitucional, las FF.AA. hubieran actuado con la intención de lesionar a quienes se manifestaban para desincentivar la protesta social. Al contrario, su intención fue la de proteger a la población", complementa el escrito.
Por otro lado, las Fuerzas Armadas enfatizaron en que son los Tribunales de Justicia los encargados de determinar eventuales responsabilidades, y defendieron el trabajo efectuado por los altos mandos durante el estado de emergencia.
"Debemos afirmar que en ningún caso los mandos de las FF.AA. ordenaron o toleraron la comisión de delitos, ni han obstruido o impedido el actuar de los organismos de derechos humanos, ni de los Tribunales de Justicia", indica el comunicado.
Por su parte, desde Carabineros también descartaron que exista una orden de causar daño a los manifestantes y destacaron la modernización por la que está atravesando la institución para mejorar sus protocolos.
"Los carabineros somos profesionales, pero al mismo tiempo es una labor desarrollada por personas, que como toda actividad humana está sometida a la posibilidad de que alguien se equivoque o cometer errores, más aún en una situación de crisis e inéditos grados de violencia como en las últimas semanas en nuestro país", señaló la coronel Karina Soza, de la Dirección de DD.HH. de Carabineros.
"Nuestra institución no ampara ilegalidades y rechaza categóricamente cualquier exceso, abuso o vulneracion de derechos humanos. Hemos puesto a disposición de la fiscalía todos los antecedentes de cada caso que ha sido objeto de querellas", puntualizó.
