Con distintas medidas cautelares quedó el teniente de Carabineros que este martes fue formalizado por el disparo de la lacrimógena que hirió en la cabeza de una joven de 17 años en el sector de la Plaza de Armas de
Puerto Montt, región de Los Lagos.
A poco un más de un mes de los hechos, registrados la noche del 26 de enero de este año, la fiscalía de Los Lagos le imputó el delito de fuerza innecesaria con resultado de lesiones graves, ilícito que se encuentra tipificado en el Código de Justicia Militar.
Según la persecutora Myriam Pérez, la agresión ocurrió luego que finalizara una actividad musical en la plaza, y cuando esta "ya estaba empezando a quedar desocupada porque se había organizado, a partir de ahí, una marcha que ya había avanzado".
"De hecho Carabineros ya había disuelto la marcha cuando regresa este funcionario y dispara contra un grupo de personas que todavía se encontraba en este lugar. Lo que la fiscalía imputa es el ejercicio de esta violencia innecesaria, porque no había ninguna situación de orden público, manifestación o ataque a carabineros que fuera necesario repeler o controlar", detalló Pérez.
Y acotó: "En este caso es una conducta que está agravada por el resultado de lesiones que tuvo la víctima".
Tras la imputación de cargos, el Ministerio Público solicitó la prisión preventiva del uniformado. La petición, sin embargo, fue rechazada por el Juzgado de Garantía de Puerto Montt, el que decretó las medidas de arresto domiciliario parcial, prohibición de acercarse a la víctima y algunos testigos, además de arraigo nacional.
La formalización del teniente se suma a otras dos imputaciones similares ocurridas en menos de una semana.
"Lo que la fiscalía imputa es el ejercicio de esta violencia innecesaria, porque no había ninguna situación de orden público, manifestación o ataque a carabineros que fuera necesario repeler o controlar".
Fiscal Myriam Pérez.
El pasado jueves la fiscalía de O'Higgins le imputó el delito de homicidio frustrado a un sargento de Fuerzas Especiales, asegurando que este disparó una lacrimógena "directamente" a la cabeza de un hombre que se encontraba de espalda y brazos cruzados en una manifestación de diciembre del año pasado en Rancagua.
En tanto, ayer la fiscalía Centro Norte formalizó por cuasidelito de lesiones graves a un capitán de la misma repartición por un hecho que data de 2015. Según el ente persecutor, el uniformado disparó, al interior de la Universidad de Santiago, comuna de Estación Central, la lacrimógena que impactó en la cara de un estudiante que se encontraba almorzando. La lesión implicó que este último perdiera la visión de su ojo derecho.