EMOLTV

De Roatán a Arica: Familia chilena varada en el mar Caribe iniciará arriesgada travesía en velero para regresar al país

Luego de pasar 54 días sin tocar tierra debido al cierre de fronteras en Honduras, Marcelo Escalante zarpará este fin de semana con la idea de recoger a más connacionales que estén atrapados en Centroamérica y deseen regresar.

07 de Mayo de 2020 | 08:02 | Por Felipe Vargas Morales, Emol
imagen

La familia pide al Gobierno que solo le puedan gestionar el paso por el Canal de Panamá.

Emol.
"Me gustaría que se pusieran en los zapatos de aquellos que no estamos en ninguna parte y que sin embargo tenemos esperanza", reza un párrafo de la carta que escribió al Presidente Sebastián Piñera el chileno Marcelo Escalante, quien permanece varado hace 54 días junto a su familia en pleno mar Caribe,

A través de esa misiva, el hombre de 52 años -que ha permanecido todo ese tiempo arriba de su barco en la costa de la isla de Roatán en Honduras sin poder tocar tierra, debido al cierre de fronteras en ese país por la pandemia del coronavirus- intentará pedir la ayuda del Mandatario y su Gobierno para emprender una arriesgada, pero noble travesía.

De esa forma, Escalante le plantea al jefe de Estado que "sabemos que la dificultad de tener las fronteras cerradas en todo el mundo hace más difícil la repatriación de muchos chilenos. Pero mi pregunta es: ¿Existe la forma de que pequeñas y medianas embarcaciones, sin necesidad de tocar tierra, puedan recoger a algunos de nuestros compatriotas?".

"Si yo zarpo desde Roatán, podría pasar a recoger a algunos de ellos. Desgraciadamente no cuento con los medios para pagar el cruce del Canal de Panamá, pero podría estar en las manos de ustedes conseguir el salvoconducto para pasar y contar con colaboración para abastecimiento y combustible, que es más económico que tratar de coordinar vuelos u otros medios", indicó.

La idea la venía reflexionando desde hace semanas, en medio de la espera por ayuda del consulado nacional en Tegucigalpa. En conversación con Emol, reconoce que el viaje "es peligroso, pero estar en el limbo es más peligroso y nosotros estamos en el limbo y estos chilenos que están en Nicaragua, en Puerto Rico, en Panamá, también está en el limbo".

"No sé que será más peligroso, yo demoro 16 o 17 días a lo más 20 días en llegar a Arica y sé que no alcanzaron a irse todos", dice, asegurando que "pusieron un solo vuelo desde Centroamérica y sé que en Panamá quedan cincuenta y tantas personas, en Ecuador, en Colombia. No me los puedo llevar a todos, pero a 20 sí".

A su juicio, el costo de viaje "es mínimo y no violas ningún derecho, porque te anclas a 200 metros de la playa y te los llevan en lancha. Al tener una pequeña embarcación, si me marcho para allá me gustaría llevarme la mayor cantidad de gente posible".

De hecho, ya al salir de Roatán partirá con dos chilenos que están en el interior de la isla hondureña. "Preparado económicamente no estoy, porque el Canal de Panamá cobra US$3.000 por pasar el barco, si es que me dejan pasar, así que necesitaría un salvoconducto de algún embajador, del Presidente o de la cancillería", dice.

El itinerario y los detalles del plan

El velero de Escalante, en el cual permanece su mujer, su hijo y dos guatemaltecos que lo acompañaron desde que zarpó el pasado 7 de marzo, soporta hasta 7.000 kilos de peso, por lo que asegura estar preparado para recibir a más pasajeros.

"El hacinamiento sería complicado, pero son solo 16 días. Tendríamos que dormir por turnos, hacer las cosas por turno, pero llegaríamos todos allá", dice, junto con admitir que "es un viaje duro, difícil, sin conocer a la gente, la convivencia puede ser complicada, pero de esas complicaciones me encargo yo, que soy el capitán del barco".

La idea es iniciar el viaje este sábado o domingo. "Lo que quiero es llegar a Chile, tengo que esperar que bajen un poco los vientos, pero ya tengo la ruta hecha y marcada con destino a Arica. Sé que una vez que pase Panamá la corriente de Humboldt está bastante bien".

"Además no hay gran actividad de grandes cargueros y pesqueros, entonces va a ser un viaje para nosotros solos, no hay grandes riesgos", añade, junto con aclarar que "yo no voy a infringir ninguna ley, existe el derecho de paso inocente, entonces me voy a ir a 3 millas náuticas de las costas para poder recibir abastecimiento y embarcar a los chilenos que quieran venir".

El itinerario comienza rumbo a Guatemala, donde dejará a los dos jóvenes locales que se sumaron al inicio de su ruta y donde espera subir a dos chilenos. "Después vuelvo a Honduras".

"Luego voy a Nicaragua, Puerto Rico, Panamá, Colombia, Ecuador y Perú. La gente que quiera venir tiene que buscar las capitanías de puerto de la marina mercante, ver dónde están, contactarse y acercarse ahí para que una lancha me los vaya a dejar", explica.

"Yo me voy a anclar a 50 o 60 metros y que me los vayan a dejar en una lancha, no cuesta absolutamente nada".

Marcelo Escalante, chileno varado
En ese sentido, destaca que necesita "la ayuda de las capitanías de puerto, de embajadores o gente de buena voluntad. Solo necesito combustible, porque uno va tirando de vela y de motor, y los víveres para las personas que van arriba, aunque sea un bocadillo. Si te comes un sándwich una vez al día, ya algo comiste, engañaste el estómago".

"¿Que van a bajar de peso? Pues sí, pero bajaremos todos, pero que tengan la esperanza de que alguien puede pasar por ellos. Yo lo conversé con mi mujer y está de acuerdo, es que hemos esperado demasiado. Esperamos costear esto con la caridad de las capitanías de puerto, de lo que algunos países te puedan reportar", afirmó.

A su juicio, las capitanías de puerto de la marina mercante son clave. "No es directamente la fuerza naval o la guardia costera, si se pide autorización vía radio ellos son muy amables. Que acerquen una o dos personas y hasta 15 o 20 personas caben y si nos dan un sándwich, da para todo el día".

"Yo me voy a anclar a 50 o 60 metros y que me los vayan a dejar en una lancha, no cuesta absolutamente nada", recalca, junto con advertir a quienes se quieran sumar consigan un chaleco salvavidas. Además, hace un llamado a quienes residan en los países que pasará que le ayuden con un bote para ocho personas, ya que él tiene uno solo para seis.