El ministro del Interior y Seguridad Pública, Víctor Pérez, analizó este domingo la situación que actualmente se vive en La Araucanía, específicamente relacionada al machi Celestino Córdova, quien se encuentra en ayuno y decidió prorrogar hasta el lunes la decisión de iniciar una huelga seca, tras entrar en conversaciones con el ministro de Justicia, Hernán Larraín.
Este diálogo fue calificado como "
una manifestación clara de voluntad de enfrentar el tema de la huelga de hambre, porque el tema de la huelga de hambre tiene connotaciones muy complejas, que ha sido la causal de la violencia muy desatada en las últimas 3 o 4 semanas, por lo tanto es importante desactivar", sostuvo en conversación con
Mesa Central de T13.
Eso sí, Pérez destacó que el Gobierno tiene un marco estrecho que implica el respeto a las resoluciones de los Tribunales de Justicia, más el fallo de la Corte Suprema -que resolvió no otorgar arresto domiciliario en su rehue a Córdova- y las normas reglamentarias de Gendarmería, "y por lo tanto es ese el campo en el cual nos estamos moviendo y nosotros hemos manifestado la voluntad para llegar a un acuerdo en esa materia".
Consultado por la intención de considerar la realimentación a la fuerza de personas en huelga de hambre, el secretario de Estado destacó que esa "es una decisión absoluta del Gobierno. Nosotros vamos a defender la vida de las personas y por lo tanto no vamos a permitir, cualquiera sea la discusión jurídica, legal, ética que exista, que para nosotros la defensa de la vida es prioritaria y vamos a hacer todos los esfuerzos para que nadie, que está presionando a través de una huelga de hambre, se cause la muerte, y nosotros, con los equipos médicos, de salud lo vamos a evitar". Además, complementó, se presentó un recurso de protección "que nos permita actuar en esa dirección".
"Nosotros no estamos negociando con terroristas, lo hemos dicho en todos los tonos. Negociar con terroristas es decir vamos a cambiar su pena, lo vamos a dejar en libertad, lo va conmutar para que se vaya a otro país. Otros gobiernos han hecho eso, nosotros no"
Ministro del Interior, Víctor Pérez
En tanto, Pérez reiteró que los delitos por los que están acusados los comuneros mapuches que se encuentran condenados, incluyendo al machi Córdova, "son delitos comunes, el asesinato del matrimonio Luchsinger es un delito común, es un asesinato, y por lo tanto, los tribunales lo analizan, investigan y resuelven en esa dirección. Que el origen pueda ser un ideal, no le quita la gravedad al hecho. El fin no justifica los medios".
El Gobierno actualmente se encuentra trabajando en tres áreas para resolver este tipo de situaciones, que en los próximos 70 días darán cuenta de nuevas iniciativas para abordarlas.
Según detalló la autoridad, "uno, es la huelga de hambre para resolverlo; otro, el orden público; y otro, el tema de fondo que sin duda el Estado de Chile está en deuda. Todos los gobiernos, particularmente en los últimos 30 años, han hecho mesas, han hecho programas, han presentado iniciativas y ninguna ha resultado, lo que demuestra que había una falta de voluntad política que hoy día es imposible evitarla".
Consultado por las críticas que realizó José Antonio Kast en entrevista con El Mercurio, a propósito de este diálogo iniciado por el Gobierno, señalando que se "está negociando con terroristas", Pérez lo descartó completamente.
"Nosotros no estamos negociando con terroristas, lo hemos dicho en todos los tonos. Negociar con terroristas es decir vamos a cambiar su pena, lo vamos a dejar en libertad, lo va conmutar para que se vaya a otro país. Otros gobiernos han hecho eso, nosotros no. Por lo tanto, quedan exclusivamente normas de carácter penitenciario que puede exceder a cualquier condenado el día de mañana".
Orden público y Plebiscito
El secretario de Estado también destacó que el Gobierno actualmente, en términos de orden público está "mucho más preparado que el 18 de octubre del año pasado, y por lo tanto se toman todas las medidas. Pero aquí lo más importante, es un llamado al país de que la violencia no ayuda absolutamente a resolver ningún problema, y por lo tanto no incentivar, no generar los eventos de violencia".
Consultado sobre su opinión frente a la
iniciativa del senador RN, Francisco Chahuán, de establecer un piso mínimo de participación para que el Plebiscito de octubre sea válido, Pérez planteó que "uno puede discutir todas las ideas, creo que ya pasó el tiempo (...) ya estamos a 70 y tantos días, las normas ya están entregadas y esas normas son las que tienen que respetarse, y en esas normas y en ese contexto el Gobierno va a actuar".
Ante la posibilidad de que el Gobierno intente liderar una iniciativa para postergar el Plebiscito, el ministro recordó que existe un acuerdo político al que se llegó para avanzar en su realización, y en su postergación a raíz de la pandemia. "El Gobierno podrá buscar, podrá tratar de convencer, pero a mi juicio el Plebiscito está establecido. Esto es un acuerdo político transversal de todos los partidos políticos con representación parlamentaria. Eso hay que cumplirlo y si se modifica, todos tendremos que estar de acuerdo para hacerlo".
"Más que un pronunciamiento del Gobierno, aquí las fuerzas políticas tienen que decir 'van a usar el Plebiscito para lo que verdaderamente está convocado o va a decir, este es un instrumento revocatorio'. Ese es el peligro y ese es el riesgo, y creo que puede demostrar una conducta antidemocrática"
Ministro del Interior, Víctor Pérez
Con todo, y a propósito de las declaraciones del senador Andrés Allamand (RN) de que votará rechazo, el ministro Pérez, también enfatizó en que su postura "
es clara para el rechazo, pero como ministro del Interior yo tengo una tarea, y esa tarea la voy a cumplir con todo mi entusiasmo y dedicación para que los chilenos tengamos un Plebiscito seguro, participativo y transparente".
Independiente del resultado -si gana el Apruebo o Rechazo- y la interpretación que pueda tener el Gobierno, en la dualidad derrota-victoria, para el ministro "lo que va a primar es el respeto de que este es un Plebiscito que tiene como propósito y objeto hacer una Convención Constituyente o, que quienes ganen, que quienes triunfen, traten de transformar esa decisión ciudadana en otra cosa".
"Más que un pronunciamiento del Gobierno, aquí las fuerzas políticas tienen que decir 'van a usar el Plebiscito para lo que verdaderamente está convocado o va a decir, este es un instrumento revocatorio'. Ese es el peligro y ese es el riesgo, y creo que puede demostrar una conducta antidemocrática", complementó.
Con todo, reconoció que "hay declaraciones de distintos actores y a mí me parece que la izquierda más radical eso es lo que va a tratar de hacer, y que por eso todas las fuerzas democráticas, los sectores moderados, tenemos que decir con claridad: Este es un Plebiscito que tiene por objeto iniciar un Proceso Constituyente a través de una convención. Eso va ir a votar la gente y no tiene otra interpretación que se pueda realizar".
