La diputada del Frente Amplio asumió en marzo del año pasado y debía dejar el puesto en marzo de 2020.
Aton
La diputada
Camila Rojas (Comunes) renunció a la presidencia de la
comisión de Educación, tras liderarla por
un año y medio.La legisladora se mantuvo por todo ese período en el cargo luego de que en marzo, cuando debía hacerse el cambio, se produjeron diferencias entre la oposición que hicieron que no se cumpliera con el
acuerdo administrativo. Situación, que por ejemplo, dejó la presidencia de la Cámara en manos del militante de Renovación Nacional,
Diego Paulsen.De esta manera, se daría paso para que se produzca esta vez el ajuste y siguiendo el acuerdo sería el turno del
Partido Socialista de ejercer la presidencia de Educación. Con esto, cuando el próximo jueves se vote por un nuevo líder, sería el diputado
Juan Santana, quien debiera asumir.
La diputada que seguirá siendo parte de la instancia, se refirió al proyecto de Educación Sexual Integral que hoy fue despachado a Sala, diciendo que se trata de "un tema fundamental que feministas y activistas vienen trabajando hace mucho tiempo, en ese sentido me voy con la tranquilidad de haber hecho nuestro aporte".
La parlamentaria frenteamplista señaló que cuando asumió el puesto "nos tocó enfrentar una agenda policial, la Ministra (Marcela) Cubillos era más ministra de Interior que de Educación", recordando el proyecto Aula Segura que no prosperó en el Congreso y la movilización que ocurrió al interior del Instituto Nacional. Además de las negociaciones entre la titular de la cartera y el Colegio de Profesores, las que estuvieron marcadas por dificultades.
Durante la presidencia de la diputada Rojas también se rechazó el proyecto del Gobierno "Admisión Justa”. "Significaba un profundo retroceso y repartía la miseria de los pocos cupos 'de excelencia' de la educación pública en vez de que poner las fuerzas en que toda la educación pública sea referente”, indicó.
Por otro lado, se aprobó la ley "Chao Dicom", que entró en vigencia el pasado 26 de agosto y que borra a todos los deudores educativos del boletín comercial. "Es un pequeño pero significativo paso contra la mercantilización. El Estado y sus instituciones se han visto en la obligación de reconocer que se ha producido un daño a los deudores educacionales, luego del reconocimiento viene la reparación, en eso seguiremos trabajando", comentó.
