Alvarado (UDI) advierte "desbande" en el oficialismo y teme que "al final del día se transforme en una montonera"

"Cuando uno está en ese tipo de situaciones hay que tomar en consideración diversas opciones y alternativas. Yo la semana pasada, el día miércoles, tenía claridad que en la sala de la Cámara de Diputados no había ninguna opción de poder rechazar la acusación. Ante eso, uno tiene que conversar desde el punto de vista del Gobierno (…) y nos dimos cuenta que el objetivo político de la acusación era recomponer la ansiada unidad (de la oposición) y para eso, la moneda de cambio era el ministro Pérez", sostuvo en radio Universo el parlamentario, quien justamente asumió el cupo que dejó Pérez en julio para ir a La Moneda.

"Fue tan burdo todo, que a los pocos minutos que se aprueba la acusación, levantan la censura contra la mesa, (…) ante ese escenario, también hay que evaluar lo que viene y una persona que tiene trayectoria política de 40 años, que ha sido elegido en diferentes oportunidades, que tiene un electorado que ha confiado en él y humanamente, debe ser muy duro pensar en terminar carrera política inhabilitado para ejercer cargos", agregó.

Según Alvarado, la decisión de Pérez fue una "correcta" y recordó que la acusación sigue en el Senado y no está definido el resultado. "Pero se enfrenta mucho más tranquilo como ciudadano que como ministro suspendido", añadió.

Ante lo complejo que ha sido para La Moneda ordenar las filas de Chile Vamos, y ad portas de la votación de un nuevo 10% esta tarde, el senador, quien fue ministro de la Secretaría General de la Presidencia, comentó que "lo peor que le puede pasar al Gobierno es tener derrotas con votos de su sector y hay que hacer un esfuerzo importante desde los partidos, entre los partidos y desde la relación del Gobierno con los partidos".

"Aquí hay un fenómeno que se repite siempre en los gobiernos en la medida que se acercan las elecciones, y si los gobiernos tienen baja apreciación ciudadana, la reacción natural, humana, de los parlamentarios es decir ‘sálvese quien pueda’ y en el ‘sálvese quien pueda’ siempre predomina la decisión particular individual de cómo me afecta en mi distrito y me da lo mismos lo que piense mi sector político, mi gobierno y eso es muy difícil de administrar, de compatibilizar los objetivos".

"Por lo tanto, el llamado es a que los procesos electorales hay que afrontarlos con unidad, hacer un esfuerzo por la disciplina y también estar dispuestos a pagar ciertos costos políticos cuando hay iniciativas que no dicen relación con nuestros principios, ideas, si no hay disposición a asumir un mínimo de costos políticos, esto puede ser un desbande que al final del día se transforme en una montonera que no tiene ningún sentido, que nos puede afectar mucho en las elecciones próximas", comentó.

En la misma línea, el senador Alvarado comentó que "puedo entender en el primer 10% la decisión de algunos que tuvieron temor electoral o visualizaron el sentimiento ciudadano a que habían problemas económicos producto de la pandemia", pero añadió que "un segundo retiro ya es dinamitar todo el sistema previsional y peor aún, es cerrar la puerta a reforma estructural de fondo en el sistema de pensiones. Es una decisión que tiene un efecto mucho más adverso que el primer 10%".

Consultado por la decisión de la bancada de RN de presentar indicaciones al proyecto del segundo retiro, Alvarado respondió que "ese camino es la búsqueda del mal menor, que el retiro en vez de ser de 18 mil millones de dólares se rebaje a la mitad, a la población más vulnerable, pero aquí quedarán –con el segundo retiro- casi 4 millones de personas sin fondos. En definitiva, el esfuerzo serio y responsable que deberían hacer los parlamentarios de la oposición es la próxima semana llegar a acuerdo transversal en la reforma de pensiones (…) es la hora de poner el pie en el acelerador".