Bajo la medida cautelar de prisión preventiva quedó Diego Ruiz Restrepo, el ciudadano colombiano de 30 años dedicado a la construcción que fue formalizado por una serie de crímenes ocurridos en las comunas de Estación Central y Santiago.
Así lo determinó esta tarde el juez del 6° Juzgado de Garantía de Santiago, Eduardo Vásquez González, quien aseguró que la libertad del imputado constituye "un peligro serio" para la seguridad de la sociedad, considerando que este desplegó un actuar indiscriminado y brutal.
El tribunal advirtió "una dinámica dirigida a provocar lesiones morales a víctimas en condiciones precarias que en situación de calle, desprovistas de protección, no solo personal, sino que institucional (...) desprovistas además de una eventual alerta".
"Los hechos dan cuenta que el imputado ataca a las víctimas indiscriminada y brutalmente, actuando sobre seguro respecto estas, sin provocación alguna, y con la ausencia de posibilidad de defensa", manifestó el magistrado.
Sumado a ello, el magistrado cuestionó parte de la evidencia expuesta por la fiscalía Centro Norte para vincular al imputado en los ocho crímenes imputados, señalando que, al menos en esta etapa de la investigación, no se logró llegar a la convicción de la participación de Ruiz en tres casos.
De esta forma dio por acreditado cinco de los ocho homicidios -uno en grado de frustrado- adjudicados hoy por la fiscal Pamela Contreras.
De acuerdo a la persecutora, la mayoría de las víctimas se encontraban en situación de calle y fueron atacadas mientras dormían. Indicó además que el hombre -que ingresó al país en 2013 y cuenta a la fecha con una condena y otros casos judiciales pendientes- actuó con alevosía.
"Los hechos dan cuenta que el imputado ataca a las víctimas indiscriminada y brutalmente, actuando sobre seguro respecto estas, sin provocación alguna, y con la ausencia de posibilidad de defensa".
Juez Eduardo Vásquez.
Los homicidios partieron el 7 de marzo. De ahí, agregó la fiscal, Ruiz volvió a atacar el 1 noviembre. Ya el 8 de este último mes abordó a cinco personas en 95 minutos.
Para ello, afirmó, Ruiz aprovechó "la oscuridad nocturna y de la condición de vulnerabilidad y fragilidad social en que la mayoría de las víctimas se encontraban, quienes vivían y dormían en la vía pública, procediendo a golpearlos con pies y luego apuñalarlas directa y certeramente en zonas vitales del cuerpo, para lo cual utilizaba un arma blanca tipo cuchillo, con el cual salía desde su domicilio con la única finalidad de matar a quienes se encontraban en esta situación".
La medida cautelar será cumplida en la Cárcel de Alta Seguridad. Se estableció un plazo de investigación de seis meses.
