Los dos gorros y dos bolsas de cinturón incas fueron entregadas ayer en la embajada de Chile en Washington.
Embajada de EE.UU.
Cuatro piezas de valor patrimonial que datan del período precolombino fueron devueltas al Estado de Chile por la Oficina Federal de Investigaciones de los Estados Unidos (FBI). Se trata de dos gorros y dos bolsas de cinturón incas, que fueron recuperadas desde una casa de subastas en la ciudad de Filadelfia.
Según los antecedentes, en septiembre de 2021 el Ministerio de Cultura de Chile tomó conocimiento de que patrimonio cultural chileno sería subastado en Estados Unidos y, a través de la embajada de Chile en Washington, solicitó el apoyo del Departamento de Estado de ese país para investigar el posible tráfico de las piezas. La investigación fue llevada a cabo por el Equipo de Delitos de Arte del FBI en la ciudad de San Francisco, California, y culminó con la entrega voluntaria de la custodia y propiedad de los objetos.
Las piezas fueron entregadas ayer en la embajada de Chile en Washington, en una ceremonia en que estuvieron presentes representantes de la oficina central del Programa de Delitos de Arte del FBI, el Centro de Patrimonio Cultural del Departamento de Estado de Estados Unidos y diplomáticos chilenos.
Ésta es la primera repatriación importante a Chile de obras de valor patrimonial en el marco del Acuerdo de Patrimonio Cultural para combatir el tráfico de bienes culturales, firmado por la Embajada de Estados Unidos y el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio chileno, en mayo de 2020.
"La firma del Acuerdo de Patrimonio Cultural entre nuestros países es un paso fundamental en la protección del patrimonio cultural y el combate contra el tráfico de estos bienes. Valoramos que este acuerdo ya esté rindiendo frutos a través de la devolución de estas piezas de alto valor para Chile", señaló el jefe de misión de la embajada de Estados Unidos en Chile, Richard Glenn.
El Acuerdo de Patrimonio Cultural es el resultado de doce años de trabajo entre la embajada de Estados Unidos en Chile y el Ministerio de Cultura y se fundamenta en la sólida alianza bilateral en materia de seguridad. El acuerdo establece un marco normativo para que las instituciones culturales y agencias de aplicación de la ley de ambos países puedan trabajar de manera conjunta y sostenida para prevenir el tráfico de bienes patrimoniales, de conformidad con las normas internacionales en la materia.
