Tras la publicación del reglamento de la Ley de Migraciones el pasado viernes 11 de febrero y la entrada en vigencia este martes del estado de excepción en sectores fronterizos de las provincias de Arica, Parinacota, El Loa y el Tamarugal, acciones aplicadas para contener y combatir la crisis migratoria, diversas autoridades locales se han pronunciado ante la afectividad de aquellas medidas.
Es más, ayer el Municipio de Colchane -comuna perteneciente a la provincia del Tamarugal, en la Región de Tarapacá- denunció que durante la tarde de este miércoles hubo un ingreso masivo de ciudadanos extranjeros ante la presencia de efectivos policiales y militares. Situación que generó reacciones en La Moneda.
El ministro del Interior, Rodrigo Delgado, explicó que el proceso de reconducción -medida contenida al interior del reglamento de la Ley de Migraciones-, se genera a metros de la "zanja" que separa a Chile de Bolivia, por lo que sí se accionaron medidas ante el ingreso masivo de migrantes. No obstante, confirmó que no se descarta la
aplicación de nuevas medidas para contener la crisis en la Macrozona Norte.
"Cuando se toma la de decisión de decretar un estado de excepción, se toma la decisión de entregarle las facultades los jefes de la defensa para poder utilizarlas. Nosotros no descartamos ninguna de ellas, no descartamos un toque de queda para poder restringir la movilidad, esto no es contra los habitantes, sino que estamos hablando de quienes se movilizan desde el lado chileno para poder conectarse con bandas criminales", afirmó el secretario de Estado.
Ante aquellos dichos, los alcaldes de Ollagüe, Calama y Arica -todas comunas pertenecientes a las provincias donde rige en estos momentos el estado de excepción- fueron consultados por Emol al respecto. Las autoridades no rechazan la idea de aplicar un toque de queda, sin embargo, algunos cuestionan su efectividad, pues manifiestan que hay muchos detalles que deben ser reforzados antes de seguir empleando medidas.
Toque de queda
Humberto Flores, alcalde de Ollagüe, comuna perteneciente a la Provincia de El Loa, Región de Antofagasta, aseguró estar de acuerdo con la posible aplicación de un toque de queda.
"Por supuesto que estaría de acuerdo con un toque de queda, toda medida adicional que se aplique es buena, así vamos a ubicar el tránsito a lo mejor de personas fuera de horario, que generalmente son los que cometen delitos de robo, de ingreso de personas, de tráfico. Por mí parte estoy llano a que se pueda aplicar un toque de queda en las zonas fronterizas", confirmó.
Es más, la autoridad anunció que es muy probable que se concrete, pues ya se ha conversado con el jefe de la Defensa Nacional asignado en la provincia: "Agradecemos el apoyo el coronel, hoy día tuvimos una reunión para conversar el tema del toque de queda, así que eso está bajo la jurisdicción de ellos,
yo creo que es más probable que apliquemos este toque de queda y estamos conversando bien para no interrumpir el proceso normal y el funcionamiento de la comuna", acotó.
Por su parte, el alcalde de Calama, Elecier Chamorro, explicó que sólo estaría de acuerdo de accionar un toque de queda, si es que "los equipos fronterizos que determinan que esto está desbaratado y descontrolado como yo creo que está sucediendo", pues aseguró que "el 90% de las personas que decantan en Calama están sin control sanitario y con documentos ilegales".
En esa línea, el jefe edilicio concretó que el Presidente de la República tiene todas las facultades para su aplicación y "si de acuerdo a lo que establecen sobre los antecedentes que tienen aporta y genera un encause en este proceso, por supuesto que nosotros estamos de acuerdo con un toque de queda".
Sin embargo, solicitó que, de concretarse la medida, debe ser efectiva, pues declaró que "el decreto de excepción en cuanto a la temporalidad es inoficioso, es poco suficiente para la crisis que estamos viviendo. Y este elemento que establece el ministro, a través de la posibilidad de decretar un toque de queda a las provincias que ya tienen un estado de excepción, sabemos que es un instrumento que está facultado, por supuesto uno tiene que entender que se están haciendo los esfuerzos necesarios, pero ojalá que sean efectivos".
"Por supuesto que estaría de acuerdo con un toque de queda, toda medida adicional que se aplique es buena, así vamos a ubicar el tránsito a lo mejor de personas fuera de horario, que generalmente son los que cometen delitos de robo, de ingreso de personas, de tráfico".
Alcalde Humberto Flores
En tercer lugar, el alcalde Arica, Gerardo Espíndola, cuestionó la idea, ya que argumentó que no sabría
cómo podría funcionar un toque de queda en aquel lugar. Pues, en este caso, cabe recordar que el estado de excepción aplica sólo en la zona fronteriza y rural de la comuna, y no en el radio urbano.
"Aplicar un toque de queda ahí no sé cómo se aplicaría, sería solamente para las persona que pasan en Chacalluta, a lo mejor se va a reducir el horario, pero me cuesta entender cómo sería el toque de queda en Arica. En el caso de Colchane podría ser, pero cuando llega una horda de personas, no sé si sería la solución", planteó.
De esa forma, precisó al Gobierno que si la medida se implementa "solamente es para dar un nombre y mostrar acciones que no van a tener ningún resultado, creo que no es buena la acción". En ese sentido, mencionó que "deberían implementarse medidas de emergencia a largo plazo, fortalecer la institucionalidad regional en materia de protección de fronteras y coordinar con los países del continente".
Evaluación Ley de Migraciones y estado de excepción
Ante la publicación del reglamento de la Ley de Migraciones el pasado viernes 11 de febrero y la entrada en vigencia este martes del estado de excepción, el alcalde Humberto Flores valoró ambas medidas y comentó que los efectos positivos ya se han visto.
"El proceso se ha llevado de una forma tranquila y eficiente, eso nos da una tranquilidad a los comuneros que ya no están pasando migrantes sin control o una reconducción hacia su país. Si bien la cantidad no es considerable, hemos derivado alrededor de 24 personas y no es comparado con lo que está sucediendo en Colchane, pero todo ha funcionado bien hasta el momento", sostuvo.
"Aplicar un toque de queda ahí no sé cómo se aplicaría, sería solamente para las persona que pasan en Chacalluta, a lo mejor se va a reducir el horario, pero me cuesta entender cómo sería el toque de queda en Arica. En el caso de Colchane podría ser, pero cuando llega una borda de horda de personas, no sé si sería la solución".
Gerardo Espíndola
Asegurando además que "
se ha visto una disminución en el ingreso, antes teníamos una cantidad de 40-50 personas semanales, actualmente ha bajado esa cantidad. Ha sido efectiva esa información de que se está reconduciendo, a lo mejor ha sido una barrera para las personas que quieren ingresar actualmente en Chile".
En tanto, Elecier Chamorro, alcalde de Calama, comentó que "aún no hemos tenido la percepción de que se haya generado un mayor control. No hemos visto un control migratorio de lo que se desató producto de la tragedia que tuvimos con nuestro vecino, algo fuerte o potente, desde el punto de vista de la implementación ha sido más escalonada".
"A lo que me refiero en específico, es desde el punto de vista del equipamiento, a la dotación y la tecnología que esté permanentemente en la zona. Por eso, nosotros tenemos un reparo respecto al tiempo del cual se señala en el estado de excepción que creo que no es suficiente, tuvo que haber sido por mayor tiempo su prolongación de implementación, dada la crisis humanitaria que estamos teniendo en las regiones del norte", criticó.
En esa línea, Chamorro manifestó que le preocupa la "poca eficiencia de la implementación del proceso, que ha sido muy lento para haberse decretado de excepción. Uno no siente la implementación concreta y rápida, el decreto salió hace tres días atrás y recién en la tarda se estaba nombrando al jefe de plaza. Eso es lo que uno le preocupa, cuando uno habla de crisis hay que darle el enfoque de crisis, hay que tener una mirada de Estado, no sólo de Gobierno".
Gerardo Espíndola concluyó que aun se apresurado evaluar los resultados del estado de excepción o el reglamento de la Ley de Migraciones: "Yo esperaría una semana, quizás un poco más en la ciudad de Arica, porque además el estado de excepción se aplicó recién el martes en la tarde, entonces llevamos muy pocos días. Por lo menos se tomó una acción importante para poder tener un control sobre la situación migratoria".
Pese a ello, y en concordancia con Chamorro, el alcalde se Arica planteó que ambas medidas fueron implementadas "muy fuera de tiempo, cuando ya estaba el descontrol, pero desde hoy a futuro, creo que la acción puntual que está haciendo, primero de reconocer que estamos en crisis migratoria y segundo, tenemos la acción puntual de reforzar la frontera con más personal del Ejército, por supuesto que es una acción importante".
Comparación con Colchane
Por último, al ser consultado sobre las condiciones no tan positivas que se han generado en la actualidad en otras comunas, como es el caso de Colchane -acorde con su propio alcalde, Javier García-, el jefe edilicio de Ollagüe, puntualizó que el continuo ingreso masivo de migrantes podría deberse a "las condiciones climáticas de la zona".
"Muchas veces acá las temperaturas son de 15 o 20 grados bajo cero, entonces puede dificultar y que la gente opte por otros pasos fronterizos, que puede ser Colchane. Lo otro, ahora con el apoyo militar, están recorriendo los 76 kilómetros que tenemos de zona fronteriza con Bolivia y están haciendo un efectivo control. El tema de la altura también, aquí hay 3.680 metros sobre el nivel del mar y las condiciones no son favorables para pasar caminando", explicó.
Además, agregó que en Ollagüe "no tenemos la movilidad que se necesita, tenemos solamente un bus intercomunal que baja entre Calama y Ollagüe día por medio, entonces no tenemos un flujo constante de buses o traslado, no están disponible los medios de locomoción como existe en Colchane. Entonces, es más dificultoso para la gente que se demora 2 o 3 días acá en poder bajar".
