Otto Wild, dueño del campo San Miguel de Callaqui, en la comuna de Alto Biobío, que fue
usurpado hace dos semanas por pehuenches, denominación que se da a los mapuches de zonas montañosas, señaló a El Mercurio que su familia
no tiene intención de dejar el lugar, pero que tampoco quiere exponer sus vidas. "No queremos irnos y tampoco queremos que nos maten", enfatizó. El productor sostuvo que aunque han sacado algunas de sus pertenencias,
"la intención, sí o sí, es seguir en el campo", del que -aseguró- cuenta con todas las escrituras. En ese sentido, Wild señaló que
no existe ni ha existido alguna reclamación territorial, fundada en títulos de merced, por parte de quienes pretenden su predio.
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