Maisa Rojas, ministra del Medio Ambiente.
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"Se aprobó con una amplia mayoría, eso es muy importante, porque demuestra que fortalecer la democracia ambiental es una política de Estado". Así se refirió esta mañana la ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, a la aprobación del Acuerdo de Escazú en el Senado, donde la iniciativa -promesa de campaña- logró 31 votos a favor, 3 en contra y 11 abstenciones.
Rojas explicó que la implementación del acuerdo significa que "los chilenos y chilenas tienen más voz, podrán ser escuchadas y por lo tanto, podrán ser más protegidos; porque este es un tratado de derechos humanos en temas ambientales", sostuvo a T13 Radio.
Según explicó la ministra, este tratado viene a reforzar y mejorar el estándar de cómo se implementan los principios de la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo; pero además incorpora "disposiciones especiales para defensores de derechos humanos en temas ambientales".
Dicha disposición "viene de una terrible realidad, y es que América Latina es un lugar peligroso para los defensores ambientales, entonces se les pide a los estados que tengan protocolos y resguardos especiales. En eso estamos trabajando con el Ministerio de Justicia y RR.EE, para hacer levantamiento de buenas prácticas en un contexto de cooperación con otros países de la región (...) En este tema no estamos tan avanzados y podemos aprender de otros países".
En el caso de Chile, la ministra afirmó que "no sabemos" si realmente es un país peligroso para estas personas porque estos delitos "no están tipificados". Sin embargo recalcó que existe "evidencia circunstancial de que defensores del medio ambiente reciben amenazas, son amedrentados; tenemos un par de casos de personas que han muerto que resultan ser defensores ambientales, pero que la justicia no ha investigado como tipificados en esa materia".
Por último, Rojas afirmó que entre las tareas pendientes de su cartera y del Gobierno está avanzar en la creación de un Servicio de Biodiversidad -cuyo proyecto lleva 11 años en el Parlamento-, y aunque "todavía le queda un trecho, le estamos poniendo mucha energía y yo personalmente estoy detrás de este proyecto para que pronto sea una realidad", subrayó.
"Tenemos muchos compromisos tanto para enfrentar la crisis de cambio climático como la crisis de biodiversidad que no vamos a poder cumplir sin contar con este servicio", zanjó la secretaria de Estado.